A casi un mes desde que Rusia inició su invasión sobre Ucrania, en los últimos días, los bombardeos en la capital ucraniana se han intensificado con ataques a edificios residenciales. Asimismo, uno de los objetivos más resonante en la semana fue el ataque a un centro comercial de Kiev. La ofensiva de las fuerzas rusas contra el shopping 'Retroville' dejó al menos ocho muertos.
Según detallaron fuentes oficiales, el ataque fue a 13 kilómetros del centro de Kiev, dejando la zona con una gran destrucción. Aunque, en el momento del ataque el shopping se encontraba vacío, funcionarios señalaron que el establecimiento tenía "mercadería a pleno" , un dato no menor por dos motivos: la primera por el desabastecimiento y la hambruna que en cualquier momento va a empezar a jugar un rol importante en la guerra, y la segunda porque contrarresta la versión de Rusia, quienes justificaron el objetivo como una zona que servía como almacenamiento de armamento bélico.
Por su parte, la periodista argentina Sol Macaluso, quien se encuentra cubriendo la guerra en Ucrania para medios españoles, comunicaba a tempranas horas del día que las primeras explosiones desde el centro de Kiev se empezaron a escuchar a partir de las 5am.
"Las alarmas de la ciudad para evacuar sonaron cerca de las 6:30am. Estamos intentando evacuar Kiev vía tierra, mucho tráfico", relataba Malacuso respecto a cómo transitaban las personas de la capital ucraniana los ataques rusos que se intensificaron en las últimas horas.
Y continúa: "La gente sale con maletas y en pijama, las colas en los bancos para sacar dinero eternas, y el tráfico más impredecible que cómo sigue ahora la cosa aquí en el país".
Pedido de refugio
La periodista argentina contó a través de un hilo de Twitter cómo logro escapar de los intensos bombardeos en Kiev, gracias a una familia ucraniana que la acogió en su bunker, junto a otros civiles que buscaban dónde pasar la noche para luego emprender viaje hasta Polonia y dejar la capital.
"La casa tiene búnker y nos dejan utilizarlo en caso de que sea necesario. La ironía de que exista gente tan buena y gente tan horrible en el mundo (...)", contaba Macaluso, y agregó: "No hay palabras para esta familia que nos acogió. Los abrazos más sentidos y dolidos que he vivido hasta hoy. Gracias eternamente, esta familia representa a todo el pueblo ucraniano. No merecen estar viviendo esto. Mi casa será su casa donde quiera que esté. Fuerza".
A su vez, Sol comentó, en uno de los canales españoles para los que cubre la guerra, algunas de las declaraciones que recabó de la familia que la acogió, sobre cómo están sintiendo esta terrible situación: "Están sorprendidos, nunca pensaron que Putin pudiera llegar tan lejos".
La reportera argentina remarcó que lo que están viviendo en la casa y en las calles es "surreal, los niños juegan y detrás las noticias de Ucrania con todas las imágenes de la guerra".
Odisea para dejar Kiev
Asimismo, la travesía de Sol Macaluso comienza temprano por la mañana rumbo a Polonia para dejar Kiev y preservar su vida. "Ahora intentando evacuar Kiev. Las carreteras están más despejadas e intentaremos llegar a otro punto 'seguro'. Aunque de seguro no hay nada en estos momentos", expresaba en su hilo de Twitter.
Sin embargo, la periodista luego contó una triste noticia: "Llegamos a IRPIN, al noroeste de KIEV, aquí vive el camarógrafo ucraniano que viene trabajando conmigo las últimas semanas, pensamos que íbamos a sentirnos más seguros pero ya no hay zonas seguras en Ucrania. La invasión es total", se lamentó Macaluso.
Cabe remarcar que, la periodista iba comunicando lo que sucedía en su viaje minuto a minuto a través de sus redes sociales mientras que buscaban un lugar seguro para resguardarse de los "bombardeos a gran escala" que les advirtieron que iba a sufrir Kiev.