A pocos días de la muerte de Juanita Milagros Sirimarco, se filtraron los chats entre la mamá de la preadolescente y una de las maestras acompañantes que la iba manteniendo al tanto de la salud de su hija mientras volvían en micro desde Córdoba, el destino que habían elegido para su viaje de egresados, a Misiones, provincia en la que vivían los estudiantes.
Claudia Díaz, madre de la nena que murió tras contagiarse Influenza B, aseguró que estuvo pendiente de la salud de su hija durante todo el viaje, pero que dejó de recibir información entre las 2 de la mañana y las 8 de la mañana.
Recién en ese momento, una de sus maestras acompañantes le dio detalles sobre el estado de Juanita: “2 h aproximadamente: hizo caca y vomitó. 2:30/3 h: vomitó, tomó Reliverán (25 gotas). Tomé la temperatura porque la vi enrojecida en el sector del cuello, tenía 38.9 °C".
"Apliqué paños frescos.3:30 h aproximadamente: la temperatura subió a 39 °C, llamamos al doctor.4 h: aplicamos Dipirona y seguimos con paños.5 h: vomitó agua. Está tomando Gatorade en pequeños sorbos, por indicación médica.5:30 h: hizo caca abundante, pastosa. Temperatura 37.4 °C.6 h: tomó su medicina y se durmió", cerraba la maestra sobre el estado de la preadolescente y algunas indicaciones médicas que recibió la maestra.
La última charla entre Juanita Milagros Sirimarco y su mamá, Claudia Díaz
Claudia Díaz habló con En Mediodía Noticias (El Trece) tras la muerte inesperada de su hija y reveló cómo fue la última charla con ella: "
“Jamás se comunicaron jamás conmigo desde las 2 de la mañana hasta las 8, cuando recién pude hablar con ella. Ya estaba muy débil, sumamente deshidratada cuando yo le digo ‘por favor, pasame con mi hija’", comenzó diciendo la mujer completamente angustiada.
Completamente angustiada, agregó: "Mi hija me dijo ‘mamá, ya no puedo más. Necesito bajarme de este colectivo. No puedo más. Intentaron bajarme, porque fijate lo que hicieron’. Le querían llevar a desayunar. Se bajaron en un lugar donde iban a desayunar. Y mi hija me dijo ‘ya no puedo, mamá, ni pararme. Mis piernas se me aflojan’. Y yo quedé loca".
Indignada, reveló: "Le dije a la maestra ‘pará ya, por favor, pará ya. En cualquier lugar, pará’. Estaban en Virasoro, Corrientes. Y ella me dijo ‘no, no vamos a parar, porque acá es caótica la atención. Esos hospitales acá tienden muy mal, Claudia’”.
La madre de Juanita relató cómo fueron sus últimos momentos de vida
En esa misma entrevista, Claudia había explicado cómo comenzaron los síntomas de Juanita: “Mi hija era una nena sana, que tuvo un accidente allá en un tobogán gigante, se sacó la rodilla del lugar y la acomodaron ahí, creo que en el agua. Y después la llevan a una clínica, la atienden, la cerraron y le dan una medicación que es diclofenal 75 y un gramo de paracetamol cada 12 horas. Ella no tuvo inconveniente con eso, pero ella ya me había manifestado que tenía dolor de garganta. Y el médico le había revisado y me dijo que con esa medicación ya podía funcionar para el dolor y la que se desinfla. Había ya varios chicos que estaban con fiebre, que estaban con dolor de cabeza, que estaban afectados antes de que le pase a ella”
“Pasaron dos días, el tercer día que fue el lunes, que mi hijita hermosa cumplió 13 añitos y festejó allá, ella estaba bien. Hasta la noche yo hablé con ella y me dijo que le dolía un poco la garganta. Y después de ahí no tuve más noticias de mi hija, porque la maestra le quitaba los celulares a la noche para que no se comuniquen los chicos. Y, a las 8:15 de la mañana recibo un mensaje de la maestra donde me hace todo un parte y me dice ‘pasamos una noche terrible’. Y ahí me empieza a detallar: ‘a las 2 de la mañana vomitó, Juanita. A las 2:30, diarrea. A las 4 tenía 39 de fiebre. Tratamos de bajarlo con paño, no pudimos. Llamamos al médico del seguro por teléfono. Le dijo que le inyecten dipirona’”, detalló envuelta en dolor.