Eva García, pareja del futbolista Alejandro Garnacho, ha decidido incursionar en el mundo empresarial con el lanzamiento de su propia marca de joyas llamada Fated Jewellery. Este proyecto lo lleva adelante junto a su hermana, Camila García, quien también está vinculada al mundo del deporte al ser la novia del jugador uruguayo Facundo Pellistri.
El emprendimiento, que se lanzará oficialmente en septiembre, está enfocado en un público adolescente y joven, ofreciendo una variedad de delicadas piezas como aros, collares de perlas, pulseras y anillos.
Las hermanas definen su marca como un "patrimonio del futuro" y buscan que Fated Jewellery alcance un estatus internacional, motivo por el cual han decidido que toda la comunicación de la cuenta, incluyendo las publicaciones en redes sociales, sea en inglés. En línea con esta visión, el perfil de la marca se destaca con publicaciones en tonos de verde esmeralda, un color que busca transmitir elegancia y frescura.
Aunque la marca aún no ha lanzado sus productos al mercado, han generado expectación invitando a sus seguidores a registrarse con su correo electrónico en el sitio web oficial de Fated Jewellery para recibir en exclusiva el primer catálogo. Este movimiento ha creado una gran expectativa entre sus fanáticos, quienes ya han dejado mensajes de apoyo y felicitaciones a las hermanas por su nueva aventura.
La unión entre la moda y el mundo del deporte parece ser una tendencia creciente, y Eva García junto a su hermana están listas para demostrar que, al igual que figuras como Wanda Nara y Antonela Roccuzzo, pueden brillar en el ámbito empresarial con un proyecto que promete mucho estilo y elegancia.
Sin lugar a dudas, una de las referentes máximas para las jóvenes es Antonela Roccuzzo quien ha sabido levantar un imperio de productos y publicidades en la última década. En las oportunidades en las que Camila García ha podido acompañar a Alejandro Garnacho en sus partidos en la Copa América, la muchacha no perdió la oportunidad de saludar a su ídola y llenarla en halagos.
