Cristina Villanueva Iñigo tiene tan sólo 25 años y decidió dejar su vida acomodada en Madrid, España, para cumplir su sueño de vivir en Buenos Aires. En contra de la tendencia de los jóvenes argentinos que deciden escapar de la crisis económica de nuestro país y comenzar una nueva vida en Europa, ella decidió probar suerte aquí pese a que tenía muy pocas seguridades.
Fue por un video que publicó en su cuenta de TikTok que se hizo viral y conquistó las redes. En dicha publicación relató cómo fue su primera compra en un supermercado argentino, en la cual comparó algunos precios locales en relación con los precios europeos y dejó en claro su asombro.
En diálogo con revista GENTE reflexionó sobre esto: "Todo me pareció carísimo. En España con 30 mil pesos argentinos puedo comprar muchísimo más de lo que se compra aquí".
Cómo era su vida "acomodada" en Madrid
Si bien nació y creció en Pamplona, decidió desarrollar los primeros años de su juventud en Madrid. Luego de recibirse como licenciada en economía y terminar un máster en desarrollo económico, comenzó a trabajar en reconocidos bancos.
"Yo ganaba 1800 euros al mes. Eso me servía para vivir en Madrid y ahorraba 500 euros por mes", explicó Cristina a este medio. Este salario sería de aproximadamente 2.300.000 de pesos argentinos.
Iñigo aseguró que tenía una vida súper estable en la capital española, pero no era feliz en su día a día. Además, aseveró que aunque aún -lleva dos semanas en el país- no haya conseguido un trabajo en Argentina se siente mucho más contenta en Buenos Aires.
Por qué eligió Argentina para vivir aunque no era la mejor opción
Súper inquieta, decidió que su vida no sería en Madrid. Entre las opciones que barajó para mudarse se encontraba Suiza, Jamaica y Argentina. Para tomar la decisión realizó una típica lista de pros y contras de cada destino.
"La verdad es que Argentina era el que más contras tenía, pero el que más tenía ganas de venir. Tenía miedo, no tenía trabajo y sabía que mis papás no me iban a apoyar. Ahí pensé que era ahora o nunca", expresó. Y sostuvo que pese a las desventajas optó por dejarlo todo y elegir Buenos Aires como su lugar de residencia.
Además, durante este año su papá había atravesado un diagnóstico y tratamiento de cáncer muy complicado. De todos modos, fue él quien le dijo: "Andá con todo. La vida es una". Por su parte, su mamá mostró más resistencia ante este plan, pero ahora que la ve feliz decidió apoyarla.
Si bien aseguró sentir mucho "miedo" por este gran cambio, se preguntó a sí misma: "¡¿Qué mejor momento que ahora que no tengo que pagar una hipoteca ni tengo una familia?!".
En cuanto a los motivos que la llevaron a elegir Argentina explicó que mucho tuvo que ver la cultura musical. En los últimos años se hizo fanática de los músicos Wos y Trueno. También destacó que le llamaba muchísimo la atención la gastronomía local.
Fue entonces que decidió dejar el piso que rentaba en Madrid, renunciar a su trabajo y en pocas semanas ya estaba en Buenos Aires.
Cómo son sus primeras semanas en Argentina
Por medio de amigos en común consiguió un departamento ubicado en pleno barrio porteño de Palermo y lo alquiló temporalmente. En sus primeros días en Buenos Aires comenzó a realizar los trámites para conseguir la residencia para poder trabajar en el país de forma legal.
En cuanto a su futuro, comentó: "Mi objetivo es encontrar un trabajo en un banco un el sector de finanzas en alguna empresa dentro de estos primeros tres meses y así poder quedarme. Me gustaría quedarme a largo plazo".
Sobre qué es lo que más le gusta de los argentinos, dijo sin dudas: "La forma de hablar me gusta mucho. En especial me gusta el 'che' y el 'posta'. Lo que más me costó fue entender que el subte era el metro y la SUBE la tarjeta. Además me costó entender lo de 'bondi'".
"Lo que más me gustó de Buenos Aires fue la gente y su cultura. Mis amigos me presentaron a sus amigos y a su familia. Eso me pareció raro porque en España no es común que tus amigos te presenten a sus familiares. No es normal tomar algo con amigos y padres", destacó entre algunas de las costumbres locales que más la sorprendieron y encantaron.
La joven española también se refirió a la "contradicción" de ir en contra de la tendencia de los jóvenes argentinos que dejan el país para forjar su futuro en Europa. Sobre esto, dijo con sinceridad: "Me hace gracia porque les entiendo. Mis amigas hicieron el camino contrario. Al final cada uno va a donde uno piensa que va a ser feliz. Es el camino de la felicidad".
En esta línea, cerró: "Yo entiendo que los argentinos estén saturados pensando en el dinero y cómo hacer para hacer las compras... Proyectarse a futuro aquí es complicado por no decir que es imposible".