En un endurecimiento de los controles fronterizos, el Reino Unido impondrá multas de 5.000 libras (6.900 dólares) a quienes intenten viajar al extranjero desde Inglaterra antes de finales de junio.
A comienzos de la pandemia, Gran Bretaña había adoptado una política muy flexible frente al Covid, sin cuarentena, para preservar la economía. Este año, tras convertirse en el país con más muertes en Europa por la pandemia, cambiaron la estrategia.
“Es muy importante que protejamos los progresos que hemos podido hacer aquí en el Reino Unido”, dijo el ministro de Sanidad, Matt Hancock, en declaraciones a Sky News.
El ministro apuntó que la medida, que será votada este jueves y entraría en vigor desde el lunes, se toma para enfrentar la tercera ola de la pandemia y sus nuevas variantes, que avanza en algunas partes de Europa.
En tanto, la nueva legislación establece que nadie puede “salir de Inglaterra para viajar a un destino fuera del Reino Unido, o viajar a un punto de embarque o estar presente en él con el fin de viajar desde allí a un destino fuera del Reino Unido” sin un motivo razonable.
Viajar al extranjero por vacaciones ya estaba prohibido, pero no había una multa por su incumplimiento. Sí hay una sanción de 200 libras a quienes no completen el formulario de declaración de viaje, que incluye los datos personales y el motivo del viaje.
Las excepciones permitidas para los viajes al extranjero son traslados por trabajo, estudios, obligaciones legales, electorales, mudanza, operaciones inmobiliarias, cuidado de niños o visitar a un ser querido en agonía, entre otras.
Tras conocerse la noticia, las acciones de valores vinculados a los viajes como las de easyJet, IAG, Jet2 y TUI cayeron entre un 3% y un 4% en las primeras operaciones del martes.
Hancock explicó que el gobierno continúa con el plan de revisar los viajes internacionales en abril y posiblemente permitirlos a partir del 17 de mayo, pero que las multas se incluyeron en la legislación en caso de que eso no sea posible. De no haber cambios, la prohibición se mantendría hasta fines de junio.
Las nuevas normas también supondrán que las protestas se consideren una excepción permitida a la prohibición de las concentraciones masivas.
El sábado, las autoridades reportaron que la mitad de la población adulta del Reino Unido ya recibió la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus.