El rumor que día a día empezó a tomar mucha fuerza se terminó por definir durante la tarde de este miércoles 12: el Gobierno decidió suspender el feriado puente que estaba previsto para el próximo lunes 24 de mayo. El argumento que esgrimieron es que con esta iniciativa se busca desalentar la circulación en plena segunda ola de coronavirus.
Si bien falta que salga en el Boletín Oficial, la resolución ya está tomada. Ante esto, las fuentes consultadas por GENTE indicaron que el feriado no se quitó del calendario, sino que se suspendió. En este contexto, se pasó para el próximo martes 17 de agosto. De esta manera, al feriado del 16 del mes mencionado (Paso a la Inmortalidad del Gral. José de San Martín), se le agregará un día más para que sea largo.
Con esta iniciativa, los centros turísticos tendrán la posibilidad de recuperar la pérdida económica durante esa fecha. Se cree que la situación que se vive por el COVID-19 va a disminuir y se podrá circular con mayor tranquilidad.
Incluso, la medida sostiene que pasándolo para dentro de tres meses, el turista tendrá la posibilidad de disponer de otras comodidades, ya que, de antemano, habrá muchas más actividades disponibles y más posibilidad de moverse sin tantas restricciones.
El Gobierno busca que la movilidad no sea como ocurrió durante el feriado largo por Pascuas. En aquella oportunidad, más allá del pedido para que no haya traslados de una ciudad a otra, en el país hubo un turismo que marcó 4.2 millones de personas recorriendo el país. Incluso hubo gran salida de turistas al exterior, a países como Brasil que viven un momento complejo con el virus.
Otra de las tramas en este contexto de incertidumbre es que va a pasar con los que ya reservaron alojamiento y sacaron los pasajes. Aún no hay una resolución tomada, pero desde el Ejecutivo nacional buscan que haya devoluciones de las reservas o, en todo caso, que haya un acuerdo como reserva del próximo feriado, en caso de que las dos partes estén de acuerdo. Acá, con la inflación de por medio, se viene una gran guerra de la que, hasta el momento, nadie quiere hablar.