Raphael Dufort fue invitado en las últimas horas por Fabián Doman y la producción de su programa, Bien de Mañana, para que comentara su experiencia con el doctor Aníbal Lotocki. El artista de Uruguay es uno de los denunciantes, que reapareció en la escena mediática tras el fallecimiento de Silvina Luna.
Al ser consultado sobre cómo le introducen el producto al cuerpo, Raphael Dufort fue contundente. "Lo mío fue una carnicería", empezó diciendo el artista uruguayo que al que Aníbal Lotocki atendió por primera vez en el 2008.
"Aníbal Lotocki en un consultorio como si fueras a hacerte una limpieza de cutis", asegura Dufort
"El te atiende en una clínica como cuando te vas a hacer una limpieza de cutis. En un consultorio que tiene todo el ruido de Córdoba y Pellegrini, con todos los bocinazos y la ventana abierta", continuó su relato.
Luego, Dufort comparó la intervención que le hizo Lotocki con otra profesional que se realizó por el estado de sus riñones. "No te pide ningún tipo de anticoagulante ni nada. Yo me operé en un quirófano por mis riñones y te puedo asegurar todo lo que me hicieron", expresó.
"Él me dijo que el producto era reabsorvible. Yo en ese entonces tenía que estar bien para un espectáculo, estrenaba en una revista y tenía que estar bien porque tenía que cantar en un cuadro", se justificó la víctima al ser consultado sobre por qué fue a ver a Lotocki.
Después, comentó su experiencia: "El tiempo no me daba, no podía estar todos los días en el gimnasio entonces lo fui a ver. Él me recibió con una jeringa que se usa para los vacunos con una gomita y una cánula, como una aguja de tejer. Me dijo 'Calmate, respirá hondo que esto es rápido'. Yo pregunté por la anestesia y me dijo que estaba dentro del producto. Entonces me agarró y me atravesó el brazo"
"Yo estaba con los ojos cerrados y fue tan rápido que no me dolió, pero me impresionó. Me sacó la aguja y el producto salía por mi brazo. Me limpió y después me inyectó el otro brazo", añadió el artista. En ese momento, atento a lo que decía su invitado, Fabián Doman le preguntó por el color y Dufort dijo que era blanco.
