El cantante celebra los 64 años en pleno duelo por la muerte de su madre y afrontando el juicio interminable con Nacho Palau por la filiación de los hijos que criaron en común hasta su separación.
Marzo será para Miguel Bosé un mes para el olvido. Los que fueron los pilares personales de su vida tambalearon. Por un lado, la muerte de su madre por coronavirus, Lucía Bosé, una mujer que a los 89 años mantenía un espíritu jovial y unas ganas de vivir encomiables y con quien mantenía ahora una fluida relación tras tiempos de desencuentros que llegaron a durar nueve años. Por el otro, Bosé había otra fecha marcada en el calendario. Un día después de la muerte de su madre estaba convocado en un juzgado de Madrid, el que dirime la demanda presentada por Nacho Palau, primero para establecer la filiación de los hijos que criaron en común hasta su separación y más tarde para resolver asuntos pendientes entre ellos.
En este juicio se decidirá el futuro de Ivo y Telmo, hijos biológicos de Nacho Palau, y que viven con él en España, y de Diego y Tadeo, hijos biológicos de Miguel Bosé, que hacen su vida en México.
Bosé y Palau hicieron un pacto para que los pequeños se vieran y estuviesen juntos alternativamente con sus padres en períodos vacacionales
El abogado de Nacho Palau, José Gabriel Ortolá, aclaró que el procedimiento tiene como principal objetivo reclamar de doble filiación.
También afirma que no es cierto que Nacho esté pidiendo ningún tipo de pensión compensatoria a Miguel Bosé; solo busca que los cuatro niños sigan manteniendo su relación.
Además ninguno de sus tres hijos temía por la vida de su madre, a quien veían mayor pero con una salud controlada, hasta que una neumonía repetitiva pudo con ella. Solo Paola estaba con ella cuando sucedió todo. En tiempos de coronavirus no hay despedidas. Paola y Lucía la recuerdan desde el campo valenciano y Miguel desde México. Desde el día en que falleció es habitual que el cantante publique mensajes dedicados a su madre. El último incluye también a su padre, Luis Miguel Dominguín. Se trata de una foto de ambos con Picasso y la esposa de este con el texto: “Y así era el azul del Lucia de esos años. ¡Grandes!”