Ricky Martin (49) muestra una y otra vez su compromiso con el pueblo portorriqueño y con la causa LGBT. Hace años aprovecha cada ocasión que tiene para manifestarse a favor del amor en todas sus formas y pedir la igualdad de derechos para todos más allá de su identidad sexual.
Así lo hacía, por ejemplo, en México cuando Yucatán se oponía por segunda vez al matrimonio igualitario. Destacaba entonces: "No pedimos tener más derechos que el resto de los ciudadanos. Tampoco queremos tener menos derechos. Simplemente queremos igualdad. Es muy simple", decía entonces.
Y cada vez que puede vuelve a levantar esa bandera: la de la igualdad, la del amor en todas sus formas. Este jueves, en el marco del debate del Proyecto 184 a través del cuál los legisladores de su país, Puerto Rico, tienen la oportunidad de rechazar las terapias de conversión, Ricky Martin hizo oír su voz.
El cantante puertorriqueño escribió una contundente carta llamando a los legisladores de su país a apoyar ese proyecto que va en contra de las llamadas terapias de conversión de la orientación sexual. "Las terapias de conversión -por donde quiera que se miren- son un tipo de tortura, y la tortura no tiene cabida en una sociedad que lleva como bandera ser democrática, progresista y humana", sentenció en una carta que compartió a través de sus redes sociales.
"Queremos una sociedad sensible, justa y más que nada, misericordiosa, empática, tolerante a la diversidad", sentenció el músico y añadió: "Hay que tener sentido de humanidad ante cualquier acción que violente la libertad individual, es decir, contra todo aquello que nos permite, simplemente, ser quiénes somos".
Acto seguido, Martin hizo un llamado a los legisladores: "quienes gobiernan deben rechazar tajantemente las terapias de conversión y, en su lugar, aprovechar la oportunidad del Proyecto 184 para hacer historia demostrando que son personas movidas por el respeto, el amor y la compasión".
Convencido de lo importante que es eliminar por completo este tipo de prácticas, el músico insistió: "No se puede ser capaz de dar paso a unas terapias que promueven una clara violación a los derechos humanos al darle poder a la tortura por un aspecto tan individual como es la orientación sexual".
Y una vez más, Ricky Martin apeló a los sentimientos que identifican al pueblo portorriqueño: "no puede ser un país de odio. Es por esto que les pido a los legisladores con derecho a votar que lo hagan a favor del Proyecto 184".
Incluso aprovechó la carta para manifestar qué lo motiva a tomar es apostura: "El amor lo es todo. Es la columna que nos sostiene. Quien vive desde el amor es solidario y compasivo por naturaleza", concluyó el músico.