La causa por el gemelo y la gemela que se arrojaron el pasado 21 de febrero desde el tercer piso de su casa en Sallent, un pueblo a las afueras de Barcelona en el que vivían con su familia, sigue en curso. En las últimas horas se conoció la cruda situación por la que pasaron, dejando en claro el acoso del que eran víctimas.
“La justicia española esta investigando los hechos de bullying y acoso escolar. Están investigando hasta a los padres. No dejan nada librado al azar. Le recomendaron a la familia de los chicos que busquen un abogado. Ya hay voces que admiten la posibilidad de bullying con las autoridades de la escuela que miraron a otro lado”, afirmó el periodista Javier Díaz.
Las cartas, dirigidas a la familia, son tremendas. De acuerdo con el texto escrito por Iván, queda en claro los motivos que lo llevaron a tomar la drástica decisión: “No aguanto lo que me pasa. No me comprenden. Estoy cansado de que me hagan bullying. Nunca voy a poder ser feliz. El resto de mi vida me va a pasar lo mismo. Les pido disculpas”.
Lo cierto es que se había cortado el cabello hace poco tiempo y quería demostrar cómo se percibía. Pero no lograba que lo acepten: lo llamaban con pronombres femeninos, algo que le causaba un terrible dolor. Ambos vivían desde hace dos años en la región con su madre, que trabajaba en una cafetería, su padre, que se desempeñaba como obrero en una fábrica, y su pequeño hermano.
Mientras tanto, Leila, dijo que veía sufrir mucho a su hermano. “Perdonen por la decisión que tomo, pero lo que él haga lo voy a seguir. No me quiero morir jeje”. De alguna manera, ella estaba tomando esta determinación para acompañar a su gemelo.
“Hay una consternación muy grande en la comunidad. Ellos vivían hace dos años en ese barrio. Con el tema del bullying, a veces los padres no se dan cuenta y piensan que los adolescentes son herméticos”, explicó el periodista argentino en “América Noticias”.
Las cartas del gemelo y la gemela
"Para todos nosotros ha sido un dolor muy grande, en las cartas que ellos escribieron lo ponían, que estaban cansadas de todo esto y que habían decidido quitarse la vida", contó una persona cercana a la familia de las gemelas a medios locales.
La dura historia de vida del gemelo y la gemela de Sallent
Los menores vivían desde hace dos años en la región de Cataluña con su madre, que trabajaba en una cafetería, su padre, que se desempeñaba como obrero en una fábrica, y su pequeño hermano.
Ambos asistían al instituto Llobregat, el cual se encontraba notificado al igual que su familia de los problemas de bullying escolar que sufrían debido a su condición de extranjeros y porque uno de ellos en el último tiempo había solicitado a sus compañeros que lo llamaran "Iván" y usaran pronombres masculinos. En ese sentido, tras la fastuosa noticia, algunos allegados a los gemelos comentaron sobre la dura vida que los hermanos llevaban en Sallent.
Cómo fueron las últimas horas del gemelo y la gemela de Sallent
El pasado martes el gemelo y la gemela se despertaron a las 7:00 de la mañana en la vivienda ubicada en la calle Estación de Sallent, a la altura del Pont Vell o de Pere Otger. A las 7:30 ambos deberían haber tomado el colectivo que los llevaría a la escuela pero lo perdieron, y decidieron ir caminando. Por la tarde uno tenía una cita con el psicólogo pero nunca llegó: alrededor de las 15:00 horas cayeron al vacío. Se encontraron dos cartas que escribieron para sus familiares.
En la casa en aquel momento se encontraba el padre de ellos que sintió el impacto de los cuerpos en la calle y rápidamente junto a otros vecinos fueron a socorrerlas. La ambulancia llegó a la propiedad y constató que la niña que se percibía varón -Iván- había muerto en el acto, mientras que su hermana aún tenía signos vitales, por lo que fue trasladada al hospital Parc Bofarull de Sabadell, donde se encuentra internada en estado crítico pero estable.
