Franco Colapinto cuenta su historia: cómo llegó a la Fórmula 1 y el "complicado momento" en el que lo ayudó Bizarrap – GENTE Online
 

Franco Colapinto cuenta su historia: cómo llegó a la Fórmula 1 y el "complicado momento" en el que lo ayudó Bizarrap

Tiene 21 años y una butaca en Williams. Es apadrinado por el músico y tiene el respaldo de grandes empresas argentinas. Tras cumplir su sueño, el piloto habla con GENTE.
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La Fórmula 1 es una jungla. Un escenario donde los dioses y los demonios se encuentran, donde el estruendo de los motores retumba como los tambores de la guerra, y donde sólo los más fuertes sobreviven. Argentina, un país que una vez se jactó de su supremacía en este circo infernal, ha pasado más de dos décadas sin un guerrero propio en la arena. Pero eso ha terminado.

Franco Colapinto, un joven de apenas 21 años, se prepara para romper esa sequía de 23 temporadas sin un compatriota en la elite del automovilismo. Y su historia, como tantas otras, está plagada de sacrificios, sudor y un poco de locura.

Para entender la magnitud del logro de Colapinto, quien este fin de semana debutará en la F.1 en el Gran Premio de Italia como piloto del equipo Williams, primero debemos recordar a aquellos que pavimentaron el camino antes que él.

Franco Colapinto en la tapa de GENTE.

Juan Manuel Fangio no sólo fue el mejor piloto de su época; fue una leyenda que moldeó el deporte. Logró cinco títulos mundiales y una mística que aún reverbera en cada rincón del planeta.

Fangio era un piloto elegante, uno que dominaba la pista con una mezcla de precisión quirúrgica y agresividad controlada. Su récord de cinco coronas estuvo vigente por años. De hecho, recién en el Siglo XXI, Michael Schumacher y Lewis Hamilton lograron superarlo al obtener siete campeonatos cada uno.

Luego, llegó José Froilán González, quien en 1951 le dio a Ferrari su primera victoria en la Fórmula 1, dejando una huella imborrable en la Scuderia. Y, por supuesto, Carlos Reutemann, el hombre que llevó al país al borde del éxtasis con sus victorias, su desafiante carrera por el título en 1981 y que tantas veces salió en la tapa de la Revista GENTE.

Pero después de ellos, casi un total silencio. Gastón Mazzacane, en 2001, fue el último en intentarlo. Desde entonces, la bandera argentina quedó ausente en las grillas de los circuitos visitados por la máxima categoría, hasta ahora...

El camino del héroe

Franco Colapinto
Franco Colapinto en el Planetario hace solo unos días. Foto: Gentileza Juan Lopetegui.

El de Franco Colapinto es un nombre que, hasta hace poco, resonaba sólo entre los más acérrimos fanáticos del motorsport. Pero algo en él era diferente... El hijo de Aníbal Colapinto, con pasado de piloto, y Andrea Trofimczuk comenzó su viaje a los 9 años en las pistas de karting, esos campos de batalla donde los futuros campeones afilan sus colmillos.

Franco no sólo afiló los suyos; los transformó en armas letales que lo llevaron a través de las categorías inferiores fuera de la Argentina –incluso corrió en Nueva Zelanda- con una ferocidad implacable pese a sus jóvenes 14 años.

Pasó por la Fórmula 4 (campeón en España en 2019 con el equipo de Fernando Alonso), Fórmula Renault Eurocup, Fórmula Regional, European Le Mans Series, Fórmula 3, Fórmula 2, y finalmente, ese destino brillante llamado Fórmula 1 con el que siempre soñó.

“Empecé con los cuatriciclos cuando era muy chico; siempre andaba con algo con motor, con algo que me diera adrenalina”, le dice Franco a GENTE.

“Y poco a poco fui yendo para el lado de la Fórmula 1. No tengo presente cuál es mi primer recuerdo especifico sobre la F.1, pero sí recuerdo que la primera vez que ví una carrera me enamoré de la categoría”, remarca este joven pilarense que siempre se ha sentido atraído por los logros de Fangio y Ayrton Senna. “Son con los que empecé a seguir el automovilismo y con los que metí un poco más adentro de del deporte. Para mí son los dos mejores”, dice.

Con una ayuda de los amigos

Franco Colapinto
Franco Colapinto en la grilla del GP de Austría. Este año disputará nueve carreras. Foto: bulletsportsmanagement.com.

En un país donde la palabra “milagro” es parte del léxico diario, lo de Franco parece justamente eso: un milagro forjado en las entrañas del esfuerzo. No fue el resultado de la suerte, ni de las conexiones privilegiadas, sino de la pura determinación y de encontrarse con personas que reconocían su talento y creyeron en él cuando todo parecía perdido.

En diferentes etapas de su campaña fue ayudado por los ex pilotos argentinos Juan Cruz Álvarez, Lucas Benamo y Lucas Colombo Russell (estos últimos aún lo asisten como coach deportivos), pero fue Bullet Sports Management, su agencia de representación, la que lo sostuvo cuando el mundo parecía derrumbarse.

Tuve que hacer sacrificios. Hay que jugársela para tratar de llegar a donde cada uno quiere...

Franco Colapinto

La española María Catarineu y el ex piloto británico Jamie Campbell-Walter, los responsables de esa empresa, fueron fundamentales para posicionar a Franco en el mundillo de la F.1 a través de un acuerdo rubricado a principios de 2023 con Williams para que forme parte de la Williams Drivers Academy, una especie de cantera que tienen los equipos de la F.1 y en la que sólo están los mejores.

Franco Colapinto
Colapinto y GENTE. El piloto de 21 años pone fin a 23 temporadas sin argentinos en la F.1.

Como miembro de la Academia, el argentino se aseguró apoyo financiero y técnico del equipo británico, algo esencial en una actividad donde los buenos resultados son tan necesarios como el agua en el desierto. Pero para llegar a la Fórmula 1 no sólo se necesita talento y buenos resultados, también hacer sacrificios...

-Te fuiste de muy joven a Europa, ¿cómo fue crecer tan lejos de tus afectos?

-Complicado, pero bueno... Obviamente fue lo que elegí para llegar a donde quería llegar.  Haberme ido de tan chico me hizo crecer muy rápido, me hizo madurar un montón en muy poco tiempo. Pero todo eso hoy ha dado sus frutos. Hace tiempo todo era una locura y hoy en día lo que está pasando es buenísimo. Tuve que hacer sacrificios. Hay que jugársela para tratar de llegar a donde cada uno quiere...

-¿Hubo algo que perdiste en tu vida por perseguir ese sueño de la F.1?

Puff! Un montón de cosas y es normal. No voy a dar detalles, pero me perdí varias cosas. Me hubiera gustado estar acá en Argentina en diferentes momentos, pero no estuve... Pero bueno, al final hay hacer un balance entre lo que uno sacrifica y se pierde y lo que uno quiere. Y mi sueño pesó un poco más que todo lo que perdí al no estar en Argentina.

El efecto Colapinto

Algo que nadie se imaginaba -ni siquiera él mismo Colapinto- fue la legión de seguidores incansables que lo han acompañado en los últimos años, colapsando las redes sociales con hashtags y mensajes de apoyo. María Catarineu lo ha bautizado como el “efecto Colapinto” y según su experiencia, es algo que pocas veces se ha visto. De hecho, la repercusión que hay en las redes cada vez que corre Franco llama la atención de Williams y la propia F.1.

Colapinto y sus fieles fanáticos.

El primer ejemplo del tremendo poderío de ese grupo de fanáticos surgió a fines de 2023, cuando el salto a la F.2 parecía una quimera. El #FrancoColapintoaF2 llegó a oídos de Bizarrap, el famoso productor argentino que convierte en oro todo lo que toca (literalmente).

Conocido por su capacidad de hacer magia con la música, decidió que también podía hacer magia en el mundo del automovilismo. “¿Qué necesitás?”, le preguntó a Franco después de que su padre lo animara a ayudar al joven piloto. El resultado fue una serie de contactos con empresas que no sólo le permitieron a Colapinto redondear el presupuesto, sino que también encendieron la chispa que necesitaba para seguir adelante. Así comenzaron a aparecer una empresa tras otra. A YPF, que ya lo venía apoyando, se sumaron Globant, FlyBondi, BixBox, Quilmes y Ripio, entre otras.

-Tenés muchísimo apoyo de jóvenes de tu edad, ¿te imaginabas que pasaría eso?

-El apoyo vino un poco por los resultados y por las diferentes situaciones que se fueron dando, pero no me lo esperaba. ¡Cuando empecé a correr en auto nadie me dijo que todo esto venía con manejar y tratar de llegar a la Fórmula 1! Poco a poco ese apoyo fue llegando y me tuve que adaptar. Pero es algo que me enorgullece un montón. Poder transmitir y compartir con la gente lo que lo que yo amo, que es el automovilismo; ver disfrutar a tantas personas que por ahí no conocían la F.1 o la F.2 y ahora las empezaron a mirar porque hay un argentino corriendo, es algo que me hace muy feliz.

Franco Colapinto Bizarrap 1
Bizarrap fue el contacto entre Colapinto y varias empresas.

-¿Cómo se dio tu contacto con Bizarrap?

-El año pasado Gonza (NdR: Gonzalo Julián Conde, el verdadero nombre del músico) me dio una mano muy grande en un momento complicado porque no podíamos cerrar el proyecto de la Fórmula 2 por la falta de presupuesto. Fue súper directo, como si lo conociera hace años. Me preguntó qué era lo que necesitaba; me quería dar una mano sin esperar nada a cambio. Fue un poco a ciegas porque prácticamente no me conocía... Es raro que alguien que casi no te conoce te diga, ‘che te quiero ayudar, quiero que este desafío que tenés vos también sea un poco mío’. Se involucró y se metió un quilombo, pobre... Pero me dio una mano muy grande y se lo agradezco un montón, además de admirarlo...

Tal es la conexión que hay entre Colapinto y los jóvenes de su edad que en octubre pasado más de 300 se juntaron en la sede del Automóvil Club Argentino cuando brindó una conferencia de prensa y otro tanto hizo lo propio recientemente durante un tour organizado por uno de los patrocinadores de Williams.

Franco Colapinto
El año pasado los fanáticos de Franco se autoconvocaron para ver de cerca a su ídolo. Foto: @jerowrc.

El 2023 terminó con un mimo al alma de Colapinto, a su grupo de trabajo y a los propios fanáticos: una jornada de pruebas en el circuito de Abu Dhabi, donde compartió la pista con otros aspirantes a la F.1.

El desempeño de Franco fue excelente, pero el 2024 le trajo más alegrías gracias a sus buenos resultados en la Fórmula 2 -ganó una carrera en Imola con una maniobra brillante que se llevó el aplauso de todo el paddock de la F.1- como participar en una sesión de pruebas libres del Gran Premio de Gran Bretaña en Silverstone, el lugar de origen de la F.1. Allí quedó a cuatro décimas del tailandés Alex Albon, con el otro auto del equipo inglés.

Franco Colapinto
Franco Colapinto en acción en Silverstone. Foto: Prensa Pirelli/Zak Mauger (LAT Images).

“Me dijeron una semana antes que iba a estar en la primera práctica de Silverstone. Sentí mucha felicidad, mucha emoción... En el equipo me dijeron que disfrute de la experiencia y así lo hice... Creo que por lo que más contento estaba era por todo lo que lo disfruté y por lo bien que la pasé. Disfruté cada curva, de cada momento. Pude extraer lo máximo que quería de la sesión y fue lo más positivo”, rememoró sobre aquel “aprobado” que se sacó en ese examen, clave para lo que vendría algunas semanas después...

Colapinto y una oportunidad que no desaprovechó

Hoy no es difícil imaginar la sonrisa que debe tener Franco en su rostro. Cuando Williams anunció el martes el mediodía que manejaría uno de sus autos por el resto de la temporada –algo anticipado varias horas antes con el “pedido/deseo” en forma de tendencia #FrancoColapintoaF1-, no fue sólo una noticia; fue un grito de victoria que resonó en cada rincón de la Argentina.

Si bien Williams ya le auguraba a Franco un 2025 con más actividad que incluían más días en su sofisticado simulador (llega a pasar más de ocho horas seguidas en un entorno virtual) y varias sesiones de pruebas privadas en circuitos con un auto de vieja generación, el tren en la Fórmula 1 suele pasar sin que uno lo espere. Y cuando pasa hay que aferrarse a cualquier vagón. Y eso fue lo que hizo Colapinto.

Franco Colapinto
Franco Colapinto disputará nueve carreras de Fórmula 1 este año.

Después del último Gran Premio de Países Bajos, en Zandvoort, Williams decidió bajar de un plumazo al estadounidense Logan Sargeant. No sólo por sus pobres resultados, sino por haber destrozado su auto en una de las prácticas libres.

Colapinto estuvo desde el vamos como uno de los candidatos a reemplazar a Sargeant, pero asegurarse esa butaca disponible de un día para el otro no fue fácil.

Colapinto debutará en la F.1 con el número 43, el mismo que identificaba a su padre Aníbal en su época de piloto.

El argentino compitió contra nombres de peso, como Mick Schumacher, el hijo del legendario Michael. Mick tenía la experiencia, el respaldo de Mercedes -que le entrega motores a Williams- y el apellido. Franco el talento, el coraje y algo más: el apoyo de las empresas argentinas.

En una reunión clave, el gigante tecnológico Globant habría inclinado la balanza a favor de Franco. Tanto que cuando todo parecía oscurecerse, la luz de la oportunidad brilló con fuerza, y el sueño se hizo realidad.

“Es un honor debutar en la Fórmula 1 con Williams. De esto están hechos los sueños. El equipo tiene una historia increíble y una misión que cumplir: volver al frente, algo de lo que no puedo esperar a ser parte”, afirmó Franco poco después de hacerse oficial su debut en la F.1. Sus palabras se convirtieron un eco de las emociones que millones de argentinos sienten al verlo correr: orgullo, esperanza, y la certeza de que lo mejor está por venir.

Sé que Franco tiene una gran velocidad y un enorme potencial. Estamos deseando ver lo que puede hacer en la Fórmula 1”.

James Vowles, team principal de Williams

Después del debut en Monza, Colapinto correrá los GP’s de Azerbaiyán, Singapur, Estados Unidos, México, São Paulo, Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi. Habrá que disfrutarlo al máximo ya que para el año que viene no quedan butacas disponibles y sería difícil volver a verlo en acción, aunque en la F.1 nunca nada está dicho... Por lo pronto en Williams ya ha confirmado a Albon y al español Carlos Sainz, que dejará Ferrari para dejarle su lugar a Hamilton. Lo único que podría permitirle al argentino volver al team británico es que alguno de los dos pilotos titulares falte por algún motivo.

Franco Colapinto
El argentino cuenta con el respaldo de Williams, quien ha quedado satisfecho con su trabajo realizado en el simulador y en las dos prácticas en pista.

Para aquellos que sueñan con seguir los pasos de Franco, él tiene un mensaje simple pero poderoso: “Nunca se rindan”. Su viaje ha estado lleno de momentos en que parecía que todo se desmoronaría, pero cada vez que el camino se tornaba oscuro, él encontró una forma de seguir adelante. “Seguí luchando y peleando por lo que querés, y al final, se va a terminar dando”, dice con una convicción que solo puede venir de alguien que ha visto la oscuridad y ha encontrado la luz.

El debut de Franco Colapinto en la Fórmula 1 no es sólo una victoria personal; es una victoria para toda la Argentina. Es un recordatorio de que los sueños, por imposibles que parezcan, pueden hacerse realidad con trabajo, pasión y el apoyo de aquellos que creen en ti. Cuando Franco suba a su Williams, no estará solo. Millones de argentinos estarán con él, cada uno sosteniendo un poco de su sueño, cada uno compartiendo un poco de su gloria.

Fotos: Diego García.

Video: Mailén Ascuí.

Arte de tapa y portada: Darío Alvarellos.

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