El trayecto lo transitaron lentamente, pero lograron reconfortar a cada uno de los que estuvo horas esperándolos. La Selección Argentina comenzó una histórica caravana alrededor de las 11 desde el predio de la AFA en Ezeiza rumbo al Obelisco -aunque no pudieron hacer el trayecto terrestre en suelo porteño- en medio de una jornada de fiesta que también se vivió adentro del micro que transporta a los jugadores campeones del mundo.
Los futbolistas salieron con las correspondientes camisetas albicelestes con la tercera estrella bordada, pero el outfit les duró muy poco: el calor producto del intenso sol al que estuvieron expuestos desde temprano los obligó a quedarse con el torso desnudo.
Lo cierto es que todo fue generosidad por parte de ellos debido a que firmaron camisetas de las distintas personas que se las arrojaban al micro, como así también banderas y gorros con la premisa de para inmortalizar este momento tan particular.
“Dale que vamos”, fue el anuncio que hizo temprano Rodrigo de Paul en su cuenta de Instagram. El jugador fue uno de los tantos que compartió algunas imágenes de lo que iba pasando.
Hubo baile, música y buenos tragos para acompañar la extensa travesía que no pudo culminar de la manera esperada debido a que tuvieron que abordar tres helicópteros en el Parque Roca y saludar a los hinchas que estaban apostados en Autopista 25 de Mayo, Obelisco y Plaza de Mayo desde el aire.