Jorge Brito eligió la provincia de Salta para establecer uno de sus proyectos más ambiciosos: Cabaña Juramento. Tiempo después, y a pesar de sus múltiples emprendimientos, acabó diciendo que ése era su lugar en el mundo. Y allí se despidió del mundo el pasado viernes, al estrellarse el helicóptero en el que volaba.
Además del agropecuario, tenía negocios inmobiliarios, energéticos y financieros. En 2017 apareció en el puesto 1.567 de la lista de multimillonarios de Forbes. Era entonces la persona más rica del país. Al año siguiente los números se movieron y pasó a estar en el 10º lugar, con un patrimonio de 1.500 millones de dólares.
En 2019 descendió al puesto 21, con una fortuna de 690 millones de dólares. Este año, en la última publicación del ránking, la revista anunciaba que los bienes del empresario ascendían a 360 millones de dólares, por lo que pasaba a ocupar el puesto Nº32 a nivel nacional y ya no aparecía en la lista de élite de los multimillonarios del mundo.
Su principal activo era el Banco Macro, la entidad privada de capitales nacionales más grande del país. Poseía un sexto del paquete accionario de la institución, cuyo modelo fue fortalecer los servicios en el interior del país y apostar al segmento de menores ingresos.
Era su empresa más conocida, pero no la única en la que estaba involucrado. Según informó Negocios & Política a través de Vizora estaba en el negocio inmobiliario, con Genneia invertía en energías renovables y con diversas firmas –Inversora Juramento S.A., Frigorífico Bermejo y Cabaña Juramento– recorría la cadena agropecuaria de valor.
Genneia tiene un parque de energía solar, siete parques eólicos y seis centrales térmicas convencionales en funcionamiento. Además, ya se puso en marcha la construcción de otros tres parques de energía eólica.
Entre los proyectos de Vizora se destaca la Torre Macro, sede del banco –diseñada por César Pelli–, Remeros Beach, Link Towers, Madero Walk, Zencity y otros.
Solía decir que su pasión era Cabaña Juramento, el emprendimiento agropecuario que inició por amor al campo y con acertada visión de negocios. Actualmente faena unas 12 mil cabezas de ganado y abastece a las provincias del NOA. Usaba el helicóptero cuando iba a recorrer sus campos y por eso se estima que estaba en una de sus visitas regulares a la estancia cuando ocurrió el fatal accidente.
