El jugador de Juventus se resiste a volver a Turín tras enterarse de que un compañero de equipo dio coronavirus positivo.
Cristiano Ronaldo voló hace unos días a Funchal, capital de Madeira, en Portugal, donde sigue la recuperación de su madre, Dolores Aveiro, que hace una semana sufrió un ACV. El jugador portugués vive en un nuevo edificio de siete pisos de su propiedad, destinado a acoger a toda la familia. Allí residen su hermano Hugo y su madre. La visita del futbolista, junto a su pareja Georgina y sus cuatro hijos, se prolongó inesperadamente a causa de la expansión de la epidemia del Covid-19.
Sin embargo, después de que el futbolista de la Juventus, Rugani, diera positivo por coronavirus, Cristiano Ronaldo decidió refugiarse en Madeira junto a su familia y no regresar por el momento a su puesto de trabajo en la Juventus de Turín.
Ronaldo, además, contaba con un permiso excepcional de las autoridades italianas para que su avión privado regresara a Turín, una de las regiones más afectadas por la epidemia, y se reincorporara a los entrenamientos de su equipo, el Juventus, que ya cuenta con un infectado en el plantel.
El club emitió un comunicado en el que informa que se activaron todos los protocolos de aislamiento del futbolista Rugani y las personas con las que hubiera podido tener contacto.
Por lo pronto, Cristiano aún no piensa regresar.