Después de la golpiza que recibió de parte de los compañeros del colectivero asesinado que reclamaban justicia en el cruce de la avenida Juan Manuel de Rosas y General Paz, el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni dejó trascender algunos detalles de la investigación. Las armas que se utilizaron para el supuesto ataque y la logística que utilizaron los delincuentes para escapar del lugar del hecho son dos de los puntos más llamativos.
“Acá no hubo plata, no hubo nada, se llevaron una cartera que no significaba nada en términos de valor”, soltó el funcionario durante un raid televisivo. Sin dar muchos rodeos al asunto y sin dar detalles, dijo que “todo hace pensar que esto no fue un simple robo” y sembró la sospecha de un presunto “ajuste de cuentas”.
Berni sostiene que la logística que se utilizó no es común asalto de esas características. “Hubo dos vehículos de apoyo para un robo a un colectivo de pasajeros en un horario en el que hay muy pocos pasajeros”, planteó como un dato que despierta dudas.
Los investigadores también buscan determinar si Daniel Barrientos, el colectivero asesinado, se encontraba aquella madrugada reemplazando a un compañero. “Fueron directamente a matarlo. Según las declaraciones de los testigos, el chofer no se había resistido en ningún momento, no había un justificativo para asesinarlo”, agregó el ministro.
También hay dudas sobre la cantidad de vehículos que se utilizaron. Los investigadores de la policía bonaerense están registrando las cámaras de las zonas para determinar la cantidad exacta de autos, se cree que se tratarían de tres.
Un detenido por el crimen y pocos indicios
El colectivero de la Línea 620, de 65 años, estaba a punto de jubilarse recibió un tiro directo en el pecho. Luego los asaltantes se tirotearon con un efectivo de la Policía porteña que viajaba a bordo, se trata de un oficial del Departamento Operaciones Urbanas de Contención (DUOC), sede Barracas, que retornaba a su domicilio luego de prestar servicios.
El hecho ocurrió pasadas las 4.30 de la madrugada de ayer cuando dos delincuentes abordaron el colectivo conducido por Barrientos en la parada ubicada en el cruce de las calles Bernardino Escribano y Cullen, del barrio Vernazza, en la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza.
Los delincuentes eran más de dos y se movilizaban en al menos un auto que se utilizó para cruzar el paso al colectivo. Una vez que lograron detenerlo, se subieron y amenazaron a todos con armas con intenciones de robar las pertenencias de los pasajeros.
Por el momento hay un solo detenido que fue reconocido por un testigo. Los investigadores secuestraron un auto quemado que se sospecha que fue el utilizado por los asaltantes para escapar y un arma con la que habrían matado al chofer.
El fiscal de Homicidios de turno en La Matanza, Gastón Duplaa, ya pidió una serie de pericias entorno al caso y tiene previsto indagar hoy al sospechoso identificado por la policía como Alex Gabriel Barone (19), quien fue localizado cuando se trasladaba en un Chevrolet Corsa Gris por la ruta 3 y el cruce con la calle Guanabara, de Virrey del Pino.
El sospechoso, que fue identificado por uno de los testigos durante una rueda de presos, tiene antecedentes del 2019 por robo agravado. De todos modos, sus familiares manifestaron que el joven es inocente y que pasó toda la noche en su casa junto a su novia y que a las 7 de la mañana había salido para ir a trabajar.
El crimen del chofer derivó en una protesta de colectiveros en la que fue atacado a golpes el ministro de Seguridad bonaerense, quien sufrió fractura de cráneo y hundimiento de la órbita ocular. Para Berni la metodología utilizada por los delincuentes no fue la habitual, ya que el modus operandi “no fue el típico que se utiliza en los robos a colectivos”. Tampoco descarta nada, incluso llegó a decir: “no sé si no nos tiraron un muerto”.
