Carlos Tévez (39) y toda su familia vivió un verdadero susto el pasado martes, cuando el ex jugador, al terminar de bañarse, se patinó con el suelo mojado e impactó su cara contra una mesa de mármol. Fue entonces que sus hijas debieron llamar a la emergencia para que lo atendieran y terminó recibiendo diez puntos de sutura en su rostro.
La noticia llenó de preocupación a los fanáticos del rojo y muchos creyeron que no lo verían presente en el partido de Independiente contra Barracas Central. Pero a pesar del dolor, Tévez no quiso dejar a su equipo sólo y asistió al juego.
Independiente terminó venciendo 3 a 0 a Barracas Central y al concluir el partido Tévez decidió brindar una conferencia de prensa. En la misma además de hablar del gran desenvolvimiento de los futbolistas y las acciones a mejorar, se tomó un tiempo para hablar de su estado de salud.
“Estoy contento y bien después del golpe en la cabeza que me hizo pasar toda la noche de ayer en el hospital”, dijo, con el ojo izquierdo hinchado y lleno de hematomas.
Fue entonces que uno de los periodistas le agradeció por estar presente a pesar de su dolor, a lo que Tévez no dudó en bromear sobre su situación. “Te voy a llevar mañana para que hables con mi señora. Mañana llega Vane así que estoy echado de casa”, cerró.
Carlos Tévez recordó la vez que lo metieron preso en Inglaterra
Carlitos Tévez fue invitado a "La Última Cena", el nuevo programa de Alejandro Fantino, por la pantalla de América Tv. Durante la entrevista el ídolo de Boca Juniors recordó la vez que quedó tras las rejas en Inglaterra, mientras se encontraba muy tranquilo jugando al golf.
"Yo no podía manejar. Vane solía llevarme al club. Un día, ella se enojó conmigo. En ese momento, tenía mi casa a solo dos cuadras de la cancha de golf, así que pensé: 'Bueno, me voy a jugar unas pelotas para despejarme un poco mientras la dejo sola'", comenzó diciendo Tévez.
"Tomé el auto, recorrí dos cuadras, llegué al club, comencé a jugar y a pegar algunas pelotas. Pero al parecer, alguien en el club llamó a la policía", explicó entre risas.
"Pronto, llegó un patrullero. Yo, como un 'Carlitos', recogí mis palos y me preparé para irme. Justo cuando salía, apenas cruzaba el área privada del campo de golf y entraba en la calle, el patrullero me cortó el paso, activó la sirena y me detuvo. Bajé la ventanilla, el oficial se acercó y, sin más, me tomó de la cabeza, abrió las esposas que llevaba consigo y me esposó al capó del auto", relató con humor, sobre esta historia, que por suerte tuvo un final feliz.
“Yo ya pensaba ‘voy 10 años en cana y en otro país’. Me llevaron a una comisaría y estuve desde las tres de la tarde hasta las tres de la mañana”, cerró.