Matías Alé, seis años después del brote psicótico que sufrió, habló con la revista Pronto y explicó cuál es su estado de salud en la actualidad, luego de aquel episodio que dio un giro completo en su vida personal y profesional.
“Estoy muy bien, gracias a Dios. Hace más de seis años que no tengo ningún episodio, tengo a mi médico que lo voy a ver cada 40 días y ahora cuando vuelva a Buenos Aires tendré mi entrevista con él”, indicó el actor en una charla con la mencionada revista.
En relación al tratamiento médico que realiza en la actualidad, Alé dijo: “Compro la medicación que me dejó, que es una sola pastilla al día para mantenerme nivelado y tengo el apoyo fundamental de mi familia. Me siento muy bien y todos están muy contentos con mi presente, siempre acompañado por mi familia y por profesionales. Ya quedó atrás todo eso”.
Después, hizo referencia a la relación que tiene con su mamá Helena: “Estuve distanciado de mi madre y no me voy a cansar de pedirle perdón. Tenemos un vínculo hermoso y si no hubiese sido por ella, no habría salido jamás. Se me hubiese hecho muy difícil”.
Y la destacó por la ayuda que le brindó en su recuperación: “Mi mamá me ayudó, me acompañó, me llevaba a los médicos, me daba la medicación y estaba pendiente de mí. Los primeros cuatro meses de la pandemia estuve en su casa y me preparaba rico de comer. No sé si hubiera salido si no hubiese estado mi vieja al lado mío. Es la persona más importante de mi vida, sin dudas".
Fue un dia de noviembre de 2015 cuando la vida de Matias Alé cambió para siempre. María del Mar, su pareja de ese entonces, relató que el actor no podía dormir, sentía que lo atacaban y luchaba contra la oscuridad. Andaba con una cruz encima que era de su padre y rezaba a los gritos.