Las multas de tránsito más habituales en Buenos Aires son por exceso de velocidad. En ese sentido y con el fin de evitarlas, existen múltiples aplicaciones que indican cuáles son las velocidades máximas permitidas y dónde se encuentran las fotomultas.
GPS, Waze o Google Maps guían y advierten a sus usuarios en sus recorridos. Para conocer si los conductores utilizan estos dispositivos, el Observatorio Vial de la CECAITRA realizó un sondeo en más de mil hogares de CABA y el Gran Buenos Aires.
El informe en números
El 26,8% del público encuestado sostuvo que utiliza aplicaciones para saber cuál es la velocidad máxima permitida, mientras que el 73,2% negó hacerlo, y el resto no eligió ninguna opción. Los adultos mayores de 65 años representan el 35% de las personas que usan estos dispositivos, mientras que en los adultos entre 30 a 64 forman parte del 24%.
Con respecto a las fotomultas, 9 de cada 10 encuestados dijo no usar las apps con ese fin. En este caso, la mayoría de sus usuarios son jóvenes menores de 29 años que buscan evitar ser multados y representan al 26%.
“Si bien la ley nacional de tránsito no detalla exclusivamente la permisividad o la prohibición de estas nuevas herramientas de localización, existen varios artículos que deben considerarse a la hora de utilizarlas. Es importante que se conozcan las ventajas, pero también las desventajas a la hora de usarlas”, destacó el vocero del Observatorio, Facundo Jaime, en diálogo con Gente.
¿Qué dice la Ley de Tránsito Nacional?
El artículo 48 de la Ley de Tránsito Nacional establece que está prohibido “conducir utilizando auriculares y sistemas de comunicación de operación manual continua”. A su vez, el artículo 77 inciso sostiene que constituye una falta grave “la conducción de vehículos utilizando auriculares y/o sistemas de comunicación manual continua y/o pantallas o monitores de video VHF, DVD o similares en el habitáculo del conductor”.
En ese sentido, Jaime expresó que “se puede concluir que el uso, tanto del GPS como de las aplicaciones en los celulares, no es recomendada mientras se conduce”. Al respecto explicó: “Se pueden dar en simultáneo cuatro tipos de distracciones: visuales, al apartar la vista de la ruta; cognitivas, al reflexionar sobre una determinada directiva; físicas, como cuando un conductor sujeta o manipula el aparato, y auditivas, al escuchar lo que le indica la aplicación”.
Otra de las preguntas que se le realizó a los encuestados fue: “¿Cómo evaluaría el respeto de los argentinos hacia las normas de tránsito?”. 8 de cada 10 contestaron que el conductor argentino no era respetuoso.Finalmente, el vocero del organismo afirmó: “Reconocer que uno no siempre respeta la ley, sería el primer paso un cambio que logre un tránsito más seguro y ordenado. Desde CECAITRA promovemos una conducción con conciencia vial, saliendo a la calle, como conductores o peatones, con atención, respeto y responsabilidad”.
