Una de las primeras imágenes conocidas en el mundo tras el golpe de estado en Afganistán por parte de los talibanes, fue la de un padre entregando a su bebé a las tropas militares estadounidenses que se retiraron del país.
Esta desgarradora historia de separación sensibilizó y puso en escena el temor de los ciudadanos, quienes hace ya dos meses que son gobernados por quienes aseguran intentar restaurar el Emirato Islámico en Afganistán.
El bebé de las imágenes era una niña de seis meses llamada Liya. Hoy ya con tres meses y medio vive nuevamente junto a su padre, su madre y su abuela materna en la ciudad de Phoenix, Estados Unidos. Según informó la CBS News, Hameed, el papá de la menor, se encontraba en aquel tiempo trabajando en el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul, y desde hacía días había quedado incomunicado con su esposa que presentía que daría a luz muy pronto.
En la desesperación la esposa de Hameed decidió acercarse a las vallas del aeropuerto y entregarle el bebé a su padre, quien conoció a la niña por primera vez y a las pocas horas la entregó a un marine para que la pusiera bajo resguardo fuera de Afganistán. “Ese día, le entregué mi bebé a un completo extraño. Lo único en lo que confiaba es que él era un infante de marina y que mi hija estaría bien”, dijo el hombre aún conmocionado a la prensa por los hechos.
En los días siguientes Hameed pudo hacer ingresar a su esposa al aeropuerto y dejar el país, con asilo en los Estados Unidos. Al ver sus padres devuelta a la niña en cuidado del militar, no pudieron dejar de llorar y agradecerle por protegerla como a su propia hija.
El Cuerpo de Marines de Estados Unidos y el secretario de Defensa de Reino Unido, Ben Wallace, quien también trabajó en la evacuación en Afganistán salieron a explicar lo sucedido. “Nos arrojaron a los bebés, algunos de ellos cayeron sobre el alambre de púas. Fue horrible”, indicó al diario britanico The Independent. “No había ni un solo hombre entre nosotros que no llorara por la situación”, continuó relatando el funcionario.
Ahora el padre de la bebé planea ponerle un segundo nombre a la niña en alusión a lo fuerte que debió ser desde sus primeros días de vida, “Pasó por los peores momentos al comienzo de su vida. Así que estoy pensando en ponerle Marine como segundo nombre”.