Fernando Samalea tocó con todos, pero siempre tuvo y sigue manteniendo una relación muy especial con Charly García. "Desde que vi La Máquina de hacer pájaros a mis 13 años y luego todos los lanzamientos de su etapa solista yo soñaba tocar con él", cuenta a Revista GENTE el batero que no solo logró el objetivo sino que participó de La lógica del escorpión, el último disco de García, sino que ahora es parte de Los instrumentales de Charly, un sexteto que rescata joyas escondidas del ícono del rock nacional y se presentará el 31 de enero en Niceto Club.
"Mas allá de tocar con un grupo, y de integrar esas bandas de aristocracia rockera que solía mostrar en sus diferentes discos, desde Yendo de la cama al living, Clics Modernos y Piano Bar, quería tocar con él. Ahí estuvo el verdadero estÍmulo para mí. Bueno, el poder del deseo hizo lo suyo porque de alguna manera pude tener ese lugarcito a su lado, algo por lo que siempre le estaré agradecido", suma el baterista que también tocó con Gustavo Cerati, Andrés Calamaro, Joaquín Sabina e Illya Kuryaki & The Valderramas.
Para homenajear a García, quien este 2025 cumplirá 74 años y cuya salud desde hace un tiempo se encuentra delicada, Samalea se juntó con Matías Mango (teclados), Fernando Kabusacki (guitarrras), Bruno Malinverni (teclados), Uma Kabusacki (voz) y Paco Arancibia (bajo), para enfocarse en temas no tan conocidos. Entre ellos: Bubulina, Veinte trajes verdes, Cinema verité, Llorando en el espejo, Plateado sobre plateado y Autos, jets, aviones, barcos.
Según cuentan, más allá de algunas limitaciones físicas, Charly sigue fiel a su esencia. "Conserva inalterables su humor, talento sobrenatural y dotes monárquicos, así como las predicciones al estilo Cassandra", sostiene Samalea.
Y agrega: "Pudo metamorfosearse como hippie chic en los setenta, moderno en los ochenta, conceptual en los noventa, y mitológico a partir del 2000, habiendo dado cuenta de una vida de entrega y construyendo un concepto de sí mismo: como esos trazos o “intervenciones” que lo transformaban por antonomasia en un pionero del metaverso. El secreto de su fuerza está en su magnetismo".
Qué significa Charly García para la cultura nacional
Hace tiempo que Charly García logró ser inmortal. Su legado está a la vista en clásicos que trascendieron fronteras. Es uno de los artistas más respetados del país y su genio creativo no descansa. Sigue componiendo y acaba de lanzar un disco.
"Me parece que toda su obra es no perecedera, está viva todo el tiempo, se resignifica", dice Matías Mango, quien además de tocar teclados es director musical del proyecto. Y suma: "La música de Charly en mi vida siempre fue una guarida, es una fuente inagotable de inspiración, es conectarme conmigo mismo".
“Hay toda una música maravillosa de Charly que casi nunca fue tocada ni es tocada en vivo en la actualidad. El grupo Los Instrumentales surgió en el momento en que con Matías y Samalea sentimos la necesidad de mantener esa musica viva y sonando. Charly es “también” esas músicas que son a la vez simples, complejas, mágicas, sensibles, virtuosas, abstractas, poderosas y fantásticas. Y nos propusimos hacerlo nosotros, de la mejor manera posible desde el respeto, la admiración y el amor por Charly”, explica sobre la agrupación, Fernando Kabusacki, uno de los ideólogos del proyecto, que grabó en La lógica del escorpión, el último disco de Charly
-¿Cómo surgió este proyecto?
Matías Mango: Siempre tuvimos la idea con Kabu de tocar los temas instrumentales de Charly. Cuando empezamos a armarlo, uno de los primeros temas que quisimos incluir fue A los jóvenes de ayer, que tiene partes instrumentales que nos encantan. Pero también tiene partes cantadas, y ahí pensamos en Uma. Samalea se entusiasmó con la idea y se sumó a la aventura. Completamos el equipo con Bruno Malinverni con quien trabajamos los teclados y Paco Arancibia, en el bajo.
Fernando Samalea: Todos deseamos homenajear a Charly, sabiendo que su genialidad se equipara a la de Leonardo Da Vinci.
-¿Cómo eligieron las canciones?
Mango: Nos pareció más interesante no ir por los clásicos hits e ir por los temas menos tocados en vivo, sobre todo en las últimas décadas, y varios de su etapa más progresiva en La máquina de hacer pájaros como Bubulina y Marilyn, y también temas cantados cuyas partes instrumentales nos parecen relevantes. Si bien toda la obra de Charly a mí me parece relevante, elegimos tocar canciones que no son los clásicos ni las más conocidas, ese repertorio de Charly que no es tan visitado, ni por otros músicos ni por él mismo. Es un repertorio muy musical y poco hitero, aunque claro no podíamos dejar afuera a clásicos como Los dinosaurios, Desarma y sangra, y Mientras miro las nuevas olas, entre otras excepciones.
Los Instrumentales de Charly rescatan aquellas joyas musicales de García como Monóculo fantástico y Crimen, divina productor” del álbum Pubis angelical (1982), o la etapa progresiva de La máquina de hacer pájaros en Obertura 777 y Marilyn, la cenicienta y las mujeresdel disco Películas (1977), o Agua y piano, del maxi simple Terapia intensiva (1984), para una obra de Antonio Gasalla.
