Islandia no solo es noticia por la actividad volcánica (este año hubo siete erupciones que movilizaron a su población) sino por ser uno de los destinos turísticos más atractivos del mundo.
Tiene encantos naturales que no pasan inadvertidos para ningún visitante. Ha inspirado a escritores como George R.R. Martin, quien, tras quedar admirado con las particularidades de la isla, creó una saga llamada Canción de hielo y fuego, o Game of Thrones en su versión televisiva. También ha sido escenario de Batman Begins y Vikingos, y muchas otras series y películas.
Es que sus paisajes van de extremos y contrastes: tiene volcanes y glaciares, y también fenómenos naturales que solo pueden verse en sus 103000 kilómetros cuadrados. Entre ellos: las increíbles auroras boreales, esos dibujos luminiscentes que adornan cielos nocturnos, y sus géiseres, unas termas naturales que cada tanto expulsan agua hirviendo con gran fuerza como si fuese una erupción.
Además de ser un paraíso para los amantes de la naturaleza, quienes hacen tours para ver ballenas y pingüinos, Islandia es una tierra casi despoblada. Solo tiene 382 mil habitantes, lo que la convierte en un destino calmo y tranquilo. También, en un oasis para quienes quieren conocer de cerca las tradiciones nórdicas y las leyendas vikingas que vibran en cada uno de sus habitantes.
Principales atracciones turísticas en Islandia
Más allá de sus vastos paisajes que han sido escenografías de películas, existen algunos puntos imperdibles que ver y visitar en Islandia, donde la historia y la mitología se mezclan con vistas y experiencias difíciles de olvidar. Desde las aguas termales de la laguna azul a un trekking por el círculo dorado, un top 3 de lo mejor de la isla.
La laguna azul
Es uno de los imperdibles de Islandia. A 50 kilómetros de su capital, estas aguas termales rodeadas de volcanes se destacan por su color azul, debido a su abundante cantidad de sílice, un componente que ayuda a tener la piel sana. Alrededor hay más atracciones que terminan de relajar a los visitantes: cascadas de hidromasaje, una cueva de vapor, fuentes para beber agua, sauna y hasta un bar. Entre las características que la hacen única se destacasu ubicación, entre campos de lava, y los vapores que emergen por la diferencia de temperatura del agua y el entorno.
El círculo dorado
Es una de las rutas más populares de Islandia. Ocupa unos 300 kilómetros y en su recorrido se observan: el Parque Nacional de Thingvellir, donde se ubican las placas tectónicas que dividen Europa de América del norte, la cascada dorada de Gullfoss, que sorprende por su caída en dos saltos sobre el gran cañón del río Hvítá, y el valle de Haukadalur, donde yacen los géiseres Geysir y Strokkur (este último entra en erupción cada 6-9 minutos y puede llegar a los 35 metros de altura). También pueden visitarse la iglesia Skálholt, el campo geotermal de Nesjavellir, el pueblo-invernadero de Hveragerdi, el cráter volcánico Kerid y el balneario Fontana.
Reikiavik y sus alrededores
Reikiavik no supera los 130.000 habitantes y es una capital repleta de reliquias vikingas. Para los amantes de la cultura existen lugares obligados, como el auditorio Harpa, cuya acústica es de las mejores del mundo, y la iglesia de Hallgrímskirkja. Ambos se distinguen por su arquitectura. El arte se respira en la ciudad, donde las esculturas y las estatuas adornan sus calles mientras que la naturaleza se erige en sus márgenes.
Como en todo el país, el secreto a voces de Reikiavik son los contrastes: casas coloridas y antiguas conviven con modernas construcciones. Dicen que en la ciudad está la casa donde plantaron las semillas del final de la Guerra Fría (La Casa Höfði) y también el Parlamento en activo más antiguo del mundo.
Las mejores vistas de la ciudad son desde el Faro Grótta, en Seltjarnarnes, donde confluyen el océano y las edificaciones.
Las auroras boreales y cuándo es la mejor época para verlas
La mitología escandinava describe a las auroras boreales como el aliento de Odín, Dios de la sabiduría, la guerra y la muerte a los valerosos guerreros en el camino al Valhalla (el cielo). Esas luces en el cielo, en realidad, se producen cuando unas partículas provenientes del Sol, conocidas como viento solar, chocan con la magnetósfera de la Tierra. Ese contacto genera las famosísimas auroras boreales. Para verlas, la mejor época es de septiembre a abril (es ideal ir en diciembre, enero y febrero, cuando las noches duran hasta 20 horas).
Si bien pueden apreciarse desde cualquier lugar donde no haya contaminación lumínica, cuánto más cerca del Círculo Polar Ártico se esté más probabilidades hay de presenciar este fenómeno. Recomiendan verlas desde ciudades como Akureyri, Isafjordur o Húsavík.
Qué películas y series se rodaron en Islandia
Batman Begins: Se filmó en la laguna glaciar de Jökulsárlón
Thor: el mundo oscuro: Se filmó en el interior del país y en Skógafoss, en el sur
Interstellar: Se filmó en Orrustuhóll
Rogue One: Una historia de Star Wars
Capitán América: Civil War
La Liga de la Justicia
Tomb Raider: Se filmó en el glaciar Vatnajökull
Panorama para matar: Se filmó en el glaciar Vatnajökull
Muere otro día: Se filmó en la laguna glaciar de Jökulsárlón
Prometheus: Se filmó en Dettifoss, la cascada que se esconde entre Akureyri y el Lago Myvatn
Trapped: Se filmó en Siglufjördur
Vikingos: Se filmó en varios paisajes islandeses a partir de la quinta temporada
Consejos útiles para viajeros en Islandia
Las condiciones meteorológicas extremas hacen de Islandia un lugar al que no se puede llegar sin tomar precauciones. Meses en los que los días duran 4 horas y temperaturas bajo cero son piezas claves a la hora de pensar cuándo visitar este hermoso país. Si bien en verano (entre junio y septiembre) no hace tanto frío y no hay tanta lluvia y nieve, es temporada alta (hay mucha gente y es más caro). En invierno, en cambio, hay menos gente, están las auroras boreales y algunos paisajes épicos de cascadas congeladas, pero las temperaturas son gélidas y casi no se ve la luz del sol.
Clima y ropa recomendada
Debido a las extremas condiciones meteorológicas, se hace obligado consultar el pronóstico con antelación, sobre todo si la idea es viajar en invierno. Además se trata de un destino donde la naturaleza es gran protagonista, por lo que se hace imprescindible contar con ropa adecuada para hacer trekking y hasta con calzado con crampones.
Una de las recomendaciones de los guías es viajar con ropa impermeable, buenos zapatos y saber que, si bien a la mañana parece un día soleado, en cualquier momento puede llover. Es un clima muy cambiante y ventoso. Contar con campera rompevientos es otro de los must a la hora de hacer la valija para visitar Islandia. Así como también con anteojos de sol, bufanda, guantes, ropa térmica y gorro.
Transporte y cómo moverse en Islandia
Si bien el sistema de carreteras islandés es amplio y fácil de recorrer, la conducción en Islandia es diferente: los caminos pueden tener gravilla, nieve y hielo. Además existen numerosos pasos de montaña, lo cual hace que sea necesario alquilar un vehículo apropiado y que el conductor tenga experiencia en este tipo de ruta. Pueden alquilarse desde casas rodantes y autos comunes hasta 4x4.
Para quienes no manejan se puede explorar la isla en autobús, ferry y avión. Islandia cuenta con un sistema de autobuses públicos llamado Strætó (www.straeto.is), que recorre todo el país. Además existen diversas empresas privadas de autobús que ofrecen rutas programadas, paquetes de viajes y excursiones de un día, así como rutas de Reikiavik a muchos destinos de todo el país.
