Sofía Zámolo y su esposo, José Félix Uriburu, están viviendo momentos muy emocionantes. Es que, el martes, su hija California cumplió cuatro años por lo que realizaron un gran festejo cont todos sus seres queridos para celebrar un año más de vida de su primogénita.
Luego de los festejos por los cuatro años de Cali, como le dicen sus padres, Sofía compartió un tierno posteo en sus redes sociales con algunos recuerdos de ese día tan especial.
"Feliz vida amor de mi vida. Sos lo más increíble que me pasó y me pasa en la vida. Agradezco todos los días a Dios por haberme mandado a un ser único y tan especial", comenzó escribiendo Zámolo muy emocionada por lo vivido.
Rápidamente, la reconocida modelo también comentó: "Sos luz, alegre, divertida, pispireta, graciosa, dulce, cariñosa, sensible, y con solo mirarnos conectamos como si nos conociéramos de otras vidas. Me diste vida en el momento en el que menos fuerzas tenía".
"Te amo y te dedico cada día de mi vida para que seas siempre feliz y poder acompañarte en este camino llamado vida. Mamá", concluyó Sofía. Y debajo de esas emotivas palabras, luego agregó: "Quiero agradecer profundamente a los que nos acompañaron en este día con tantísimo amor y a las personas que trabajaron tanto para que todo salga tan lindo".
Los detalles del festejo de cumpleaños de California
El festejo de los cuatro años de California fue con temática del programa infantil Las aventuras de Bluey. Por lo que, tanto la torta como la decoración era con los personajes de estos dibujitos animados, y detalles con muchos colores.
Cuando llegó el momento de la torta, los invitados pudieron ver que era circular y alta, toda rosa, con detalles multicolores, como el número '4', las granas a su alrededor y los arcoíris. A su vez, tenía cuatro muñequitos de Las aventuras de Bluey, unos pompones, velita rosa y una bengala celeste con muchos brillos.
Este mismo diseño se pudo ver en el espacio que armaron para que la niña sople las velitas. Es que, había un living con mesas de diferentes colores, y más mesas de decoración con la misma forma que la torta. En un costado estaban los dibujitos animados de Las aventuras de Bluey. Y todo estaba rodeado por globos de diferentes tamaños, en tonos pastel.
Para los más chiquitos, las sillas bajas eran de colores pasteles, y los platos y vasos eran de los personajes del mencionado personaje animado. Mientras que, para los adultos, armaron mesas con manteles y un diseño más refinado.