Las freak offs "eran verdaderos espectáculos de terror". Así describieron los fiscales federales a las orgías en las que Sean "Diddy" Combs (54) habría cometido "crímenes sexuales". Acusado de abuso, explotación, extorsión y tráfico sexual, el rapero que se encuentra detenido desde el 16 de septiembre en el Centro Metropolitano de Detención de Brooklyn –considerado un verdadero "infierno en la tierra"– intentará probar su inocencia en el juicio que arrancará el 5 de mayo de 2025.
Las investigaciones federales en curso revelaron la existencia de una red de explotación sexual que operaba tanto en sus residencias en Los Ángeles y Miami, como en lujosos hoteles. Allí es donde se celebraban, tal como consta en la causa, estos encuentros "coercitivos y abusivos" que representan el núcleo de su polémico caso que hace semanas sumó una demanda colectiva con 120 nuevas víctimas y hace días, siete nuevas acusaciones que apuntan a conductas abusivas que se remontan a los 90's.
Según las denuncias, en estos eventos Diddy obligaba a mujeres y trabajadores sexuales a participar en actividades íntimas no consensuadas. El escalofriante detalle que saltó a la luz en las últimas horas lo brindó Ariel Mitchell-Kidd, abogada de Adria English, una de las denunciantes que ya había acusado al músico de tráfico sexual en julio pasado. En una reciente entrevista, la letrada acusó a Combs de violar a su representada "con la ayuda de un guardaespaldas y un amigo". Además, Mitchell-Kidd sostuvo que el cantante amenazó a su clienta con un cuchillo y la obligó a quitarse la ropa antes de "rociarla con una sustancia líquida".
Tras el allanamiento de las propiedades del magnate del hip hop en Miami y Los Ángeles, las autoridades reportaron haber encontrado armas de fuego, narcóticos, lubricantes y miles de botellas de aceite para bebés, que sospechan que "mezclaba con éxtasis líquido" para adormecer a los participantes y atacarlos sexualmente, registro mediante, con puestas orquestadas y hasta cámaras. El éxtasis líquido o GHB, que suele ser administrado por vía oral y tiene efectos en quince segundos, provoca desinhibición, somnolencia, dificultad para moverse e incluso pérdida de consciencia.
Ya son muchos los demandantes que dan a conocer un modus operandi de lo más sistemático en lo que refiere a sus prácticas abusivas. Su exnovia Cassie fue una de las primeras en levantar la voz. En noviembre del año pasado, brindó evidencia que los fiscales consideran elemental: se trató de un video que data de marzo de 2016 en el que el músico la golpea, la patea y la arrastra por los pasillos de un hotel. Mientras buena parte de Hollywood se quiere mantener lo más lejos posible de cualquier vinculación que pudiera surgir tras su asistencia a las célebres "fiestas blancas", otros famosos, como Beyoncé, planea llevar a juicio a todo aquel que la relacione con presuntos delitos sexuales.
Por su parte, los representantes legales de Combs insisten en que se trata de una conspiración para dañar la reputación del músico nacido en Harlem, a la par que aseguran que las relaciones que se citan "fueron consensuadas". Mientras continúan sumándose acusaciones, repasamos las fotos de las residencias de Diddy en las que, ya sea en cuartos especiales con cámaras secretas, o tras puertas cerradas ya caída la noche en las fiestas de modo "todo el mundo sabía bien qué pasaba".
Holmby Hills, Los Ángeles
La casa del escándalo. Aquí se celebraron las célebres white parties: las puertas de la opulencia ahora bajaron las cortinas pero esconden secretos que muchos guardaron. Lo que era un símbolo de estatus a comienzos de los 2000, las magníficas celebraciones "de blanco" en las que todos se quería fotografiar con Diddy, habrían sido la antesala de sus delitos extorsivos y abusivos.
A continuación, la súper mansión que Combs compró en el exclusivo vecindario de Holmby Hills, en el oeste de Los Ángeles, por 40 millones de dólares. Se destaca por su estilo europeo y sus increíbles comodidades. Abarca 1579 metros cuadrados de espacio habitable y además suma una casa de huéspedes con otros 278 metros. Claves y señales de las propiedades que hoy están en la mira.
Star Island, Miami
La mansión de Diddy en Star Island, Miami, es una de las propiedades más lujosas de esta exclusiva isla artificial, ubicada en la Bahía de Biscayne. Con unas vistas panorámicas impresionantes, la mansión cuenta con 8 habitaciones, 12 baños, y más de 3.500 metros cuadrados de pura opulencia.
Entre sus comodidades destacan una piscina infinita, gimnasio de última generación, un muelle privado y un cine en casa. La ubicación privilegiada lo rodea de vecinos igualmente famosos como su ex Jennifer Lopez y Shaquille O’Neal.
La propiedad abandonada en Atlanta
Por último, nos centraremos en la mansión abandonada de Diddy en Atlanta: una impresionante propiedad estilo barroco italiano, ubicada en el suburbio de Dunwoody. Construida en 1987 y adquirida por el rapper en 2003 por $2.6 millones, la casa cuenta con 8 habitaciones y 16 baños.
Lujo y decadencia en postales inusuales. Hay grafities en espejos y paredes, bisagras desarmadas, escaleras parcialmente destruidas y a los pisos le faltan piezas. Una crisis financiera lo obligó venderla finalmente en 2007. Consiguió deshacerse de la residencia a sólo 1,3M. A pesar de la transacción, la empresa fiduciaria nunca encontró un comprador.
Fotos: archivo Atlántida, real state y Fotonoticias.
