McLaren ha vuelto a sorprender al mundo del automovilismo con el lanzamiento del McLaren W1, un hiperdeportivo que representa la culminación de décadas de innovación y rendimiento extremo. Este deportivo se enmarca en la célebre serie “1”, que ya había dejado huella en la industria con el icónico McLaren F1 de 1992 y el revolucionario McLaren P1 de 2013.
El F1, reconocido por su diseño innovador y su récord como el auto de producción más rápido del mundo, sigue siendo un símbolo de exclusividad y rendimiento. Por su parte, el P1 marcó el inicio de la era híbrida en los hiperdeportivos, estableciendo un estándar que el W1 se propone superar.
El corazón del McLaren W1 es un motor V8 de 4.0 litros con doble turbocompresor, desarrollado desde cero para ofrecer una impresionante potencia. Este motor, conocido como MPH-8, es capaz de girar hasta 9.200 revoluciones por minuto, garantizando una entrega de potencia inigualable. Complementando este sistema de combustión interna, el W1 cuenta con un motor eléctrico que aporta 342 caballos, generando un total de 1.275 CV que aseguran un rendimiento sobresaliente y 1.353 Nm de par.
A pesar de su impresionante potencia, el W1 es sorprendentemente ligero, con un peso total de 1.399 kg, gracias a su innovador chasis de fibra de carbono, Aerocel. Esta combinación de potencia y peso permite al W1 acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2.7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 320 km/h.
El diseño del W1 no se limita solo a su impresionante motor; la aerodinámica juega un papel crucial en su desempeño. Incorporando tecnologías de la Fórmula 1, como el sistema DRS (Sistema de Reducción de Arrastre), el W1 puede optimizar su carga aerodinámica y velocidad punta. Además, el vehículo cuenta con un alerón trasero móvil y un piso diseñado para generar efecto suelo, lo que resulta en una carga aerodinámica que puede alcanzar hasta 1.5 toneladas.
En modo pista, el W1 puede reducir su altura en hasta 3.7 cm en la parte delantera y 1.7 cm en la trasera, mejorando aún más su capacidad de agarre. Este nivel de ingeniería asegura que el W1 sea no solo rápido en línea recta, sino también increíblemente ágil en curvas.
El interior del McLaren W1 ha sido diseñado con un enfoque en la ligereza y la funcionalidad. Con un asiento fijo y pedales ajustables, cada elemento del habitáculo está optimizado para reducir el peso. Las puertas tipo alas de gaviota, llamadas Anhedral, no solo ofrecen un acceso espectacular, sino que también son parte del diseño aerodinámico del vehículo.
El W1 también cuenta con una pantalla táctil de 8 pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto, asegurando que los conductores estén conectados sin sacrificar el enfoque en el rendimiento.
La producción del McLaren W1 estará limitada a solo 399 unidades, haciendo de cada ejemplar una rareza. Con un precio base de 2.1 millones de dólares, este hiperdeportivo no solo es un vehículo, sino una inversión en un legado automotriz. Además, McLaren ofrece una garantía de 4 años para el tren motriz a combustión y de 6 años para la batería, asegurando tranquilidad a los propietarios.
