Roberto Moldavsky viajó a Israel por el casamiento de su sobrino y se encontró con el conflicto regional tras los misiles lanzados desde territorio iraní. Según contó este viernes al aire de Paraíso fiscal (OLGA), la boda del hijo de su hermana se hizo pese al permanente estado de alerta en el que se vive en dicho país y opinó: "Es una cosa muy impensada, muy difícil de digerir, de naturalizar para los que no vivimos acá".
El crudo relato de Roberto Moldavsky desde Israel
"Viajamos por el casamiento de mi sobrino y decidimos quedarnos hasta el 7 de octubre a los actos que realizan los familiares de los rehenes, que ahora no sabemos si se van a hacer por la situación de seguridad, para no juntar mucha gente, y en el medio nos encontramos con estas novedades así que está muy movido", comenzó diciendo Roberto Moldavsky en diálogo con Luciana Geuna y todo el equipo del mencionado ciclo de Olga.
Entonces, Roberto explicó que al momento de viajar junto a su hijo, Eial Moldavsky, reinaba el conflicto de la Franja de Gaza pero la situación estaba más tranquila desde el lado de Israel, pues "ya no caían misíles de Gaza, pero sí caían misiles del Líbano en la zona fronteriza pero el resto del país estaba en una normalidad, por decirlo de una manera".
Después, siempre según la palabra del comediante, creció la escalada en el Líbano y comenzaron a llegar los misiles a Tel Aviv. "El casamiento se hizo igual pero en un momento estábamos bailando y sonaron las sirenas", recordó el también actor.
Y sobre el procedimiento para llegar a un refugio en dicha ciudad, la segunda más grande de Israel, explicó: "Tenés algunos segundos de acuerdo a la zona en la que estás. Si estás muy cerca de la frontera es distinto pero en Tel Aviv tenés un minuto y medio...".
"Todos los lugares públicos, como un salón de fiestas, tienen refugios cerca para todos los invitados, entonces entramos todos a un lugar muy grande, que tienen las condiciones de construcción para soportar la caída de un misil. Y bueno, entramos, estuvimos 10 minutos, salimos y seguimos bailando, como si fuera un corte de luz, una cosa muy impensada, muy difícil de digerir, de naturalizar para los que no vivimos acá", contó Moldavsky.
Además, el cómico dijo que para él la situación no es tan ajena pues esta no fue su primera vez en un búnker. "Lo hablaba con Galia (su hija)... Yo viví en Israel en la época de la Guerra del Golfo que venían misíles desde Irak entonces estaba naturalizado con los refugios y las sirenas...".
"Esto fue distinto pero bueno, acá son muy disciplinados, hacen lo que tienen que hacer, casi no hay víctimas de homicidios... entonces vas y pasás ese momento que para mí es raro, difícil, pero ya la tercera, cuarta vez entrás...", añadió en ese sentido.
Y recordo que otra vez entró con Eial, su sobrino y su hermana. "Y casi estábamos conversando de que mi hermana había hecho unas galletitas en el horno y se quemaron. Y alguno quería ir a dar la vida para sacarlas del horno...", remarcó sobre esa ocasión. "Empezás a sumarlo como parte de tu rutina", precisó con angustia.
La firme visión de Eial Moldavsky
A mitad de la nota, Eial se sumó a la transmisión en vivo y aseguró: "Acá la gente finge demencia, la vida acá sigue. No sé si es porque están acostumbrados. Obviamente que lo del otro día no fue normal, no repitió el patrón de los días anteriores pero bueno, salís y el mundo (por la gente) está caminando por la rambla, tomando cafés, saliendo con amigos, tomando cerveza. Es muy rara la situación de vivir en un estado de conflicto".
Y concluyó: "No pareciera haber en la región en estos momentos grandes fuerzas promotoras de la paz... Ni el Gobierno israelí, ni Hamas, Hezbolá, Irán o lo que sea que haya tienen hoy dentro de su discurso algo que tenga en el horizonte algún tipo de solución diplomática y eso es para mí lo más terrible de todo".