La serie “Cris Miró (Ella)”, producida por TNT y Flow y que actualmente puede verse también por Max, relata la historia de la icónica primera mujer trans argentina en triunfar como vedette en la noche porteña.
Su corta vida, sin dudas, generó enormes repercusiones en las redes, sobre todo en aquellos que no llegaron a ser contemporáneos a Cris y que la quisieron conocer un poco más. Entre los interrogantes que inundaron la virtualidad surgió el de la verdadera identidad de Federico Robles, interpretado por Victorio D’Alessandro. Él existió pero tiene otro nombre y fue el gran amor de la vedette.
Quién es Federico en la vida real
El Federico de la serie en la vida real se llama Pablo, un hombre de Necochea que fue fundamental en su historia de vida. La acompañó en el momento en que ella fue elegida, en 1995, como la primera vedette trans de la revista del Teatro Maipo.
En la serie muestran la tensión que vivían Cris y Pablo (en la serie Federico) por no hacer pública su relación en pos de, en palabras del representante, mantener la idea de que ella seguía "disponible".
También exponen que él tenía sus propios anhelos como artista. A diferencia de Cris, Pablo viajó desde su Necochea natal a Capital Federal porque soñaba con ser famoso.
En los primeros tiempos se destacó en el ámbito de los strippers y taxi boys al contar con un físico llamativo. Tal vez su trabajo que un mayor cambio en su vida le generó fue como barman en Gaysoline, una disco gay en Recoleta, donde tuvo su primer encuentro cara a cara con Cris.
La tensión de la relación, que no terminaba de consolidarse, se vivía también en el ámbito familiar, donde en los momentos en los que Pablo visitaba la casa de Cris, ella lo presentaba como un amigo.
El reconocido coreógrafo Ricky Pashkus, en una entrevista, definió en una frase la imponente bellezas que portaban tanto Cris como Pablo: “Yo vi entrar a un muchacho de una belleza pocas veces vista y con un chico atrás, Pablo, que era Brad Pitt”, dijo y recordó que por ese entonces él era presentado como “Pablo Marcos, bailarín y pareja de Cris Miró”.
Además de sus anhelos artísticos, Pablo tuvo en su juventud en Necochea varios años dedicados al deporte: jugó al vóley en el Centro Vasco de la ciudad y rompió récords provinciales en atletismo en carreras de 100 metros.
En el libro de Carlos Sanzol, en que se inspira la serie, se dan más detalles sobre las idas y vueltas que tuvo esta relación, y destacan algunos testimonios que dan algunas pistas sobre por qué finalizó de forma abrupta esa historia de amor entre la vedette y el actor.
Uno de los asistentes de Cris, Pablo Costa, aseguró que la vedette siempre estuvo enamorada del actor y bailarín, pero que las tensiones generadas por la fama y la exposición se llevaron puesta la relación. En ese sentido, reforzó la idea de que el representante imponía que Cris se presente todo el tiempo como soltera.
Por otra parte, se rescata el testimonio de una amiga de Cris, Jorgelina Belardo, quien aseguró que el fin de la pareja tuvo que ver con el hecho de que Pablo no habría soportado el protagonismo que Cris tenía en el ámbito social, algo que durante la serie se aborda.
Cris Miró es una producción de ocho capítulos que se estrenó al cumplirse 25 años de la muerte de la modelo, y muestra en la piel de Mina Serrano, la historia basada en la novela Hembra, Cris Miró – Vivir y morir en un país de machos, de Carlos Sanzol.