Paula Colombini, la reconocida modelo de los 90 que brilló en las pasarelas de todo el mundo y fue la cara de importantísimas firmas internacionales como Versace, Guess, Emporio Armani y Polo Ralph Lauren, hace ya varios años que dejó de lado el modelaje para adentrarse en un universo completamente distinto.
Lejos quedaron los viajes alrededor del mundo y las largas jornadas de campañas fotográficas para Paula, quien nació en Floresta y supo brillar en Milán, Nueva York y París, entre otras ciudades íconos de la moda.
Es que esta "súper modelo en los 90, comunicadora y productora", tal como ella se define en sus redes, con el tiempo se volvió "vegetariana, jardinera, huertera y compostadora". Y acaba de lanzar su propio emprendimiento asociado a ese costado que durante mucho tiempo mantuvo guardado solo para ella.
En detalle, Paula acaba de lanzar un ambicioso proyecto en el que, a través de sus conocimientos, ofrece cursos virtuales de jardinería, compostaje y plantas nativas, talleres presenciales y workshops para empresas.
"Desarrollamos una serie de propuestas que permiten a las organizaciones interiorizarse en el mundo huertero y estimular hábitos sostenibles en sus espacios y en sus equipos, incrementando la conciencia sobre el cuidado del ambiente y el respeto por la naturaleza, mejorando el bienestar laboral", informan en la página web de dicho emprendimiento.
Colombini además ofrece "charlas inspiracionales, diseño de jardines y terrazas con plantas nativas y comestibles" y la venta de "box empresariales con productos amigables con el ambiente".
"Es mi forma de comunicar conectando mi experiencia en la huerta con mi manera de vivir... Sentir cómo el meter las manos en la tierra, el sentarnos en la naturaleza, el oler y ver verde puede ayudarnos a mejorar", expresó la exmodelo en la presentación de su emprendimiento.
Y recordó: "A los 19 años comencé la facultad; y en forma paralela llegaron mis primeros trabajos, dos comerciales. Casi como una premonición mi futuro adulto comenzaba a armarse muy similar a lo que había proyectado. Recibía la atención y las miradas que había imaginado. Estaba construyendo la profesión que quería, con miradas y con viajes, Tokio, París, Milán, New York".
"Pero, a los 32 años, comencé a sentirme incómoda; empecé a no reconocerme, ni en mi voz, ni en mi imagen. Empecé a darme cuenta que no sentía admiración genuina por lo que hacía", añadió la exmodelo.
Y concluyó: "Decidí transformar mi vida, y comencé a recorrer un camino de más de 10 años buscando esa transformación. Me senté a pensar pero esta vez, la mirada volvió hacia mí, navegué por mi interior y me encontré sembrando, germinando, cosechando".
Además, en un reciente posteo que subió a su cuenta de Instagram, la también productora expresó: "Mi carrera en la moda me preparó para llegar hasta acá, y transformarme en Paula Colombini, 'la chica de la huerta'. Lo magnífico de la vida es animarse a cambiar las veces que sea necesario".