En la industria automotriz hay colaboraciones que se destacan por su singularidad y estilo. La reciente alianza entre Morgan, la icónica marca británica, y Pininfarina, el renombrado diseñador italiano, ha dado como fruto un vehículo excepcional: el Morgan Midsummer. Este automóvil combina el diseño clásico británico con la elegancia y pureza de líneas italiana, creando una joya automotriz única en su clase.
El Morgan Midsummer se basa en la plataforma CX, la más avanzada desarrollada por Morgan hasta la fecha. La carrocería del Midsummer es de aluminio, y su creación es una verdadera obra de arte.
Con paneles modelados a mano, se requieren más de 250 horas de trabajo para completar una carrocería que se adhiere al bastidor mediante potentes adhesivos. Siguiendo la tradición de Morgan, el bastidor está hecho de madera, un material que confiere al vehículo una personalidad y calidez únicas.
Pininfarina ha integrado la madera como un elemento de diseño fundamental. En particular, la madera de teca se utiliza en el exterior, formando una estructura claramente visible que rodea la cabina y actúa como un distintivo estético. Este detalle artesanal involucra hasta 400 capas de teca de poco más de medio milímetro de espesor, creando un acabado refinado y elegante.
Bajo el capó, el Morgan Midsummer está equipado con un motor BMW de seis cilindros biturbo, el mismo que se encuentra en el Morgan Plus Six. Este motor, acoplado a una transmisión automática ZF de 8 velocidades, proporciona una potencia que, aunque no ha sido declarada oficialmente, se estima en torno a los 335 caballos, como en el Plus Six.
Puede que no sea una cifra abrumadora en comparación con otros superdeportivos que alcanzan los 800 o 1.000 caballos, pero el Midsummer pesa sólo 1.000 kilos, lo que asegura una relación peso-potencia impresionante.
El nombre Midsummer no es una elección al azar. En Gran Bretaña, esta época se considera ideal para disfrutar de un coche descapotable como este. Además, cerca de la fábrica de Morgan se encuentra Midsummer Hill, una colina utilizada históricamente por la marca para probar sus vehículos en pendientes pronunciadas, añadiendo un toque de historia y tradición al nombre del modelo.
Solo se fabricarán 50 unidades del Morgan Midsummer, lo que garantiza su exclusividad y atractivo para coleccionistas y aficionados a los coches clásicos y de alto rendimiento. Aunque el precio no ha sido anunciado, se estima que podría rondar entre los 300.000 y 350.000 euros. Esta cifra, aunque elevada, no será un obstáculo para los mejores clientes de la marca, que verán en el Midsummer no solo un automóvil, sino una pieza de colección y una inversión a largo plazo.
De hecho, se recomienda a los futuros propietarios que especifiquen en sus testamentos que el vehículo no pueda ser vendido durante varias décadas, asegurando así su valor y exclusividad para las generaciones futuras...