En mayo de este año, Benjamín Vicuña se animó a mostrar las luces y sombras de su corazón al compartir con el público los pensamientos, palabras y sensaciones que lo atravesaron al afrontar uno de los momentos más duros de su vida: el de la pérdida de su hija mayor, Blanca Vicuña (2006-2012).
Fue a través del libro 'Blanca, la niña que quería volar', que el actor se mostró absolutamente vulnerable. Fue él mismo quien de puño y letra escribió: "Este libro es un tributo a mi hija y una expresión desbordada y honesta de la experiencia que me tocó vivir. Una tragedia que me atravesó como un rayo y me dejó vacío. Me costó años asimilarla y de alguna manera sigo transitando el desierto, pero seguí viviendo. En estas páginas hablo acerca de mi niña y mis pesares. También de las herramientas que me sirvieron para iluminar noches oscuras. Espero que puedan servirle a alguien. Que quienes están atravesando una pérdida, sufriendo o acompañando un duelo, puedan encontrar algo de alivio y esperanza. Una pequeña luz en mitad del océano cuando no vemos la orilla".
Gracias a su valentía, fueron muchos los padres que pudieron encontrar consuelo en sus palabras y acciones. De hecho, muchos de ellos se acercaron a hablarle al actor y a expresarle todo lo que los movilizó.
Pero más allá de su libro, en este 2023 Benjamín Vicuña también vivencio otros momentos que le brindaron felicidad tanto a nivel personal como laboral. El más reciente ocurrió este lunes 18 de diciembre, cuando acudió al instituto educativo en el que estudia Benicio Vicuña, el hijo de nueve años que tiene junto a Carolina Ardohain.
"Me explota el pecho de felicidad y orgullo. Mi Benicio, mejor compañero", escribió Benjamín luego de tomarse una foto con su hijo sosteniendo el diploma rodeado de estrellitas que dice: "Reconocimiento San Alipio. Quien tiene un amigo ha encontrado un tesoro". Junto al nombre del niño, figuran las firmas de su maestra y directora.
Sonriente como nunca, Benjamín no perdió la oportunidad de demostrar lo orgulloso que se siente por el nuevo logro de su querido hijo.
Benjamín Vicuña y Leo Sbaraglia recordaron su "encuentro de comedia romántica en Madrid" y hablaron de la dificultad que los une
En épocas de vivos de Instagram, el argentino Leonardo Máximo Sbaraglia y el chileno Benjamín Vicuña Luco conversaron desde sus casas por más de una hora.
En ese tiempo, ambos recordaron la vez que se vieron en las calles de Madrid. "Fue un encuentro de comedia romántica mala porque vos estabas comprando algo, yo te vi de lejos, vos me viste, hubo un `sos, pero no sos´", arrancó narrando divertido Vicuña, y Sbaraglia continuó: "Además creo que no nos habíamos visto nunca. Yo la primera vez que te vi fue en la película Promedio rojo, que vos estabas fantástico, y después empezaste a laburar acá".
"Bueno, la cuestión es que caminamos hasta Chueca y hablamos de un proyecto de teatro, y vos me dijiste `uy, bancame que está por salirme algo´. ¡Hijo de p---! A las dos semanas leo en el diario `Sbaraglia, Almodóvar y compañía´, y dije ¡qué guacho! ¿Cómo no me lo dijiste? ¡Caminamos como 15 kilómetros!", le echó en cara Benja antes de que su interlocutor justifique: "Es que había unos nervios... Creo que no iba a decir nada hasta que saliera".
La charla siguió por amigos en común, personajes, obras, infidencias –Plata quemada es una de las películas favoritas de Sbaraglia– y hasta por momentos comiquísimos como cuando Benjamín se atribuyó el fracaso de una serie –Inés del alma mía– "a su mal acento de español del 1500". Tema que lo llevó a hablar de la dificultad que tiene para ocultar su acento chileno: "¡Es difícil! No exagero, estuve cuatro/cinco meses con una couch en mi casa y me costó muchísimo, y me acordé de vos porque sos un referente de cómo has trabajado los acentos. Es dificilísimo. Yo llevo unos quince años viviendo en Argentina y recién en el 2019 me acerqué un poquito al acento argentino y pude actuar tranquilo".
Dando por sobreentendido que el chileno se estaba refiriendo a su personaje de Torcuato Ferreyra en Argentina, tierra de amor y venganza (eltrece), Sbaraglia sorprendió con un comentario que dejó en claro que él vio la novela: "A mí me parece que lograste un acento muy natural y muy lindo. Nunca me incomodó, así que lograste algo muy lindo".
Sumándose al tema, Leo también acotó: "A mí me tocó una película llamada Carmen de 1830 ¡y yo tenía un miedo! Y en esa película el acento me salió bien y la actuación quizás no tanto, porque todo el mundo estaba tan pendiente de ese tema que de pronto no fue lo esperado. Y en la película Was Network (en español, La red avispa) tuve que hacer un acento cubano y me salió bien, pero ¡yo todavía me estoy preguntando por qué me salió bien!" "Es una dificultad añadida", reflexionó mientras Vicuña acompañaba sus palabras asintiendo con la cabeza.