A veces apostar al amor no es una tarea simple. Pero cuando se da naturalmente se puede, y este es el caso. Es que Baby Etchecopar (70) le volvió a dar una oportunidad al corazón de la mano de Silvina Cupeiro (59), la persona que llegó a su vida dos años después de la muerte de Adriana Paz y con la que se casa esta semana después de siete años de relación.
“Este sábado es la gran fecha. Desde el primer día le dije que me quería casar, pero se iba aplazando la fecha”, cuenta el periodista a GENTE en la previa de la celebración que tendrá lugar este fin de semana en un conocido salón de la Costanera.
“Todos los que vienen tienen que ver con el ambiente artístico porque son los de toda la vida. Susana no puede venir porque no está en Buenos Aires, pero van a estar Mirtha Legrand, Marcela Tinayre, Guillermo Francella, Gustavo Sofovich, Eduardo Feinmann, Daniel Hadad, Yanina Latorre, Rodrigo Lussich, Adrián Pallares y muchos más. Se mezcla la familia con gente del ambiente, pero todos tienen un porqué. Ninguno es para la foto”, agrega sobre la lista de la que se está ocupando especialmente Claudia Villafañe, la wedding planner elegida por el flamante matrimonio.
-¿A Jonatan Viale?
-No. Me encantaría que este junto a Eduardo Feinmann (peleados desde hace unos meses, no se dirigen la palabra en el canal LN+), pero ya van a estar Sofovich con Marcela Tinayre y no quiero ver los platos revoleados por el aire. No es un casamiento griego.
Baby Etchecopar.
"Tengo la idea de que sea una fiesta familiar grande"
-Un dato muy curioso es que los invitados pueden elegir la música que se va a escuchar a lo largo de la noche.
-Sí, eso es idea de Claudia, que se está ocupando de todo. La idea que tuvo es bárbara. En su mayoría somos gente grande. Yo sugerí música de los setenta y ochenta, pero se que hay de todo y por eso abrimos el abanico para que haya un mix.
-¿Tienen preparada alguna sorpresa?
-Vamos a tener un par de shows musicales y una saxofonista, pero el mejor show lo voy a hacer yo arriba del escenario con un mini monólogo de media hora en donde vamos a hablar de cada uno de los invitados. Hace unos días me llamó el Mago Black para regalarme el show. Va a estar bueno porque se van a entretener. Tengo la idea de que sea una fiesta familiar grande.
-Pasando al tema de la lista de regalos, ¿qué necesita una pareja como la suya que está tan instalada en la vida?
-No mucho. Lo que pasa es que estamos inaugurando muy pronto nuestra nueva casa que va a ser de los dos porque ahora cada uno tiene la suya. Es un nuevo comienzo, un proyecto que tenemos en común. Yo busqué la propiedad que queda a unas diez cuadras de la que tengo ahora en Acassuso. La vamos a estar inaugurando el 16 de febrero con una fiesta con amigos aprovechando que es mi cumpleaños.
-¿Luna de miel?
-A nosotros nos gusta viajar. Nos vamos a ir a República Dominicana con toda la familia. Y después, en enero, nos tomamos unos días en Miami en donde vamos a tener nuestro momento de soledad, aunque ahí también van a estar todos los integrantes de la familia.
La historia de amor de Baby Etchecopar y Silvina Cupeiro
Hay que destacar que la relación entre el conductor de Basta Baby (A24) y Cupeiro –hija del piloto de Turismo Carretera Jorge Cupeiro, quien falleció en 2021–, se fue dando muy paso a paso hasta conseguir formar una familia ensamblada con María Paz y Leandro, los hijos que él tuvo con su anterior pareja, y las tres hijas que tuvo ella.
“Yo la tenía vista como la hija de un amigo. Dios, la vida, nos cruzó en algún momento. Podría haber sido una simple salida a comer, pero me enamoré y arrancamos a salir. No nos separamos más" cuenta.
-Me intriga mucho saber cómo fue la conversación que tuviste con Jorge para decirle que estaban enamorados.
-Fue una cosa de locos. Él ya estaba grande. Que un amigo tuyo, que es un tipo grande, se enamore de tu hija… fue raro. No lo sabía. Un día llegamos a una comida familiar juntos y le preguntó a su esposa qué pasaba. “Baby y la nena están saliendo”, fue lo que le dijo ella. Para ese momento hasta creo que estábamos viviendo juntos. Pero lo tomó bien.
-Teniendo en cuenta que ya la conocías, ¿cuándo sentiste que hiciste el clic y te diste cuenta que estabas enamorado?
-Estuve casi dos años solo y nadie me convencía. Una cosa es ir a comer con una amiga y otra es ponerte en pareja después de estar con alguien tantos años. Uno no tiene ganas de estar conociendo, que le hagan planteos… de casualidad un domingo me fui al barco de Jorge a almorzar, apareció ella y charlamos de cómo estábamos cada uno en el plano sentimental. Le pregunté si el sábado siguiente volvía al barco, me dijo que no sabía y fue. Quedamos en vernos. Cuando lo hicimos, ella se estaba por ir a Europa y le dije: “Quedate que quiero casarme con vos”. En una demostración de amor devolvió el pasaje porque le dije que si se iba la situación se podía enfriar.
Baby Etchecopar.
"Podría haber sido una simple salida a comer, pero me enamoré y arrancamos a salir"
-Ella separada y vos viudo, una forma de acompañarse.
-Sí, es triste la soledad. Cuando Dios te pone una mujer así en el camino, te convence de que esa persona nació para vos. Ella venía de una relación conflictiva en donde la pelea era parte del matrimonio. Un día ella me discutió algo y le dije “si discutimos más de tres minutos no vuelvo más”. A partir de ese momento cualquier discusión se diluye como arena en el agua.
-¿Cómo es el día a día de la pareja?
-Maravilloso. Te juro que ella me hace reír desde que me despierto hasta que me voy a dormir.
El desafío de la familia ensamblada
El clan Etchecopar está compuesto por el afamado periodista, sus dos hijos, María Paz y Leandro, y las tres hijas que tuvo ella en su anterior relación.
-¿Fue difícil que tus hijos la aceptaran teniendo en cuenta que venías de una relación de toda la vida?
-Cuando los hijos son grandes cuesta más, tienen otros conflictos. Dos hijas de ella viven en Europa y con la que vive en Buenos Aires somos muy amigos y nos queremos mucho. Federico, mi hijo, se ensambló desde el primer momento y Leandro también. A María te tengo que decir que le cuesta un poquito.
-¿Por qué?
-Le cuesta ensamblarse por un tema de vergüenza, no creo que sea por una cuestión de afecto. No te olvides que cuando perdes a tu mamá es un lugar difícil. Nadie la va a reemplazar, lógicamente. Aunque están siempre los celos con el padre. Hay que limar rispideces. No te olvides que yo tengo 70 años… no es que papá se casa a los 42. Ya estoy grande. Hay que dialogarlo desde otro lado.
-Es difícil.
-La idea sería juntarlos a todos. A mi me encantaría esa imagen de la familia grande. Igual, para mi nosotros tenemos seis hijos: los quiero y me peleo con todos por igual.
-¿Van a estar todos en la fiesta?
-Sí. Hasta logré que Leandro, que es un indio, se ponga un traje. Hoy estaba emocionado probándoselo y me llamó tres veces para ver cómo le quedaba. Es la primera vez que usa un traje en su vida…. ¡Es un hippie todo tatuado! Que él use traje es como que Marta Minujín use un vestido de fiesta.
