Su nombre es aclamado en Europa, y vive un gran presente profesional al formar parte de uno de los certámenes más vistos de la televisión italiana. Sin embargo, con una enfermedad de por medio y la distancia con sus hijos, Wanda Nara (36) se mostró vulnerable y abrió su corazón al público.
La famosa contó cómo se siente con su vida dividida en tres ciudades: Roma, donde ensaya y graba para cada gala del Ballando con le stelle. Estambul, donde la esperan su pareja Mauro Icardi y cuatro de sus hijos, y, Buenos Aires, donde vive su hijo mayor, Valentino, quien juega para River.
La empresaria se quebró en vivo, al hablar de su familia y dejó ver su lado más sensible, al contar una charla privada que tuvo con su hija menor, Isabella:
"Volví a casa, me quedé tres días y... no quiero llorar, perdón. La más chica vino con dos pruebas de la escuela. En una se sacó un 2, en la otra un 1. Me dijo que fue porque yo no estaba".
Fue entonces que confesó: "Extraño a la familia", dijo al borde del llanto, aunque reconoció que si algo la ha ayudado a no decaer, es que: "en Roma todo el mundo es tan amable conmigo", contó.
Aunque en varias ocasiones, Wanda aseguró que este proyecto le ha hecho muy bien y de hecho, su médico le autorizó estar en la competencia, se sinceró: "Realmente no tengo fuerzas, estoy muy cansada cuando termino los ensayos. Son muchas las horas de ensayo".
Y, finalmente, sobre su hija más pequeña sostuvo: "A veces los niños, uno piensa que no entienden, que no ven el esfuerzo de lo que uno está haciendo, y al final son los que dan la respuesta justa", cerró con la voz entrecortada.
El día que Wanda Nara se refirió a su familia en el Bailando de Italia
En una de las galas del certamen, la empresaria definió su paso por la competencia de la siguiente manera: "Es un desafío, siempre te lleva a buscar lo mejor y superarte a ti mismo. En este caso, en esta etapa de la competencia, estoy buscando dar lo mejor de mí....", comenzó diciendo.
Más adelante, le consultaron cómo manejaba el hate en las redes, y expresó: "Definitivamente, tengo una coraza... hay cosas o comentarios que te hacen mal, que te lastiman, especialmente cuando me dicen cualquier cosa sobre mi familia... Me duele, me enoja demasiado. Soy una madre, una pequeña leona que nadie puede decirle algo de los niños... Siempre le enseño a mis hijos a ser fuertes, y no creo que nadie pueda decirle a mis hijos quién es su mamá, porque nacieron y han crecido dentro de mí primero", señaló Wanda.
La famosa cerró: "Tengo 5 corazones, y por ejemplo, esta cicatriz que tengo, que tal vez para otra mujer seria fea, para mí es el recuerdo de los 5 momentos más bellos que he vivido.Por supuesto, tengo celulitis, puedo tener algunas cicatrices, pero me recuerdan a mis embarazos, quiénes han estado en el período más hermoso de mi vida", agregó.
