“Sí, Hubo un momento mágico que encendió la chispa”, admite a Revista GENTE con toda la frescura de sus 19 años el conductor de carrera de paraguayo-alemán Joshua Duerksen, uno de los nombres que empiezan a surcar los caminos informativos latinoamericanos, a partir de una ilusión que cada día se acerca con más impulso a la meta de llegada: convertirse en el primer piloto paraguayo en llegar a la Fórmula 1. Una historia que empezó a gestarse hace más de una década y merece contarse.
“Aunque me sumergí de lleno en este mundo a los 12 años, mi pasión por los autos comenzó mucho antes”, empieza a relatar los tiempos en que la chispa empezó a encenderse durante un viaje familiar. “Admito que no los nuestros no eran viajes comunes como los de los demás: éramos una familia de amantes del kartismo, y siempre que teníamos la oportunidad nos subíamos a estos pequeños vehículos y salíamos a correr por las pistas llenos de adrenalina… Aunque, claro, al principio nada resultó tan simple”, reconoce Duerksen refiriéndose al primero de los inconvenientes que debió sortear.
Claro, es que el benjamín de la casa todavía no había alcanzado la altura suficiente para llegar al pedal del acelerador de un kart. Por fortuna, mientras su rostro veía reflejada la frustración de no poder unirse a la diversión, la creatividad de su padre lo alejó de la sombra de la pista: “Él compró uno de esos largos flotadores de piscina que son como un espagueti y con habilidad y paciencia, lo cortó a medida para que yo pudiera alcanzar de manera cómoda el acelerador del kart, ¡y ran ran ran!”, imita el sonido de un motor.
Aquel instante en el que tomó el improvisado pedal y logró acelerar no sólo “fue un momento inolvidable de mi existencia”, sino también la génesis de su arribo al mundo de los motores. “La emoción de encontrarme al mando de su propio destino -admite a la distancia a ocho años de la anécdota- me provocó una sensación que jamás olvidaría”.
Persiguiendo el sueño de la Fórmula 1
Lo cierto fue que pronto su padre le compró un kart y Joshua empezó a competir en carreras regionales. “Poco a poco comencé a perfeccionar mis habilidades. Cada curva, cada adelantamiento, cada vuelta de práctica, me acercaba más a mi sueño de convertirme en un piloto profesional de automovilismo”, memora.
Así se abrió camino en el mundo del kartismo, ganando una primera carrera en Vallelunga, Roma (Italia) para, a fuerza de talento para el volante y dedicación, demostrar contar con lo que se necesitaba para alcanzar la grandeza en el automovilismo.
“Hay que entrenarse, estar bien atento a aprender y concentrarse muchísimo en los momentos clave -explica hoy su experiencia-. Por ejemplo, sólo tienes un día antes de cada carrera para prepararte en la pista, y también un auto específico para utilizar. La adaptación rápida y la capacidad para enfrentar lo desconocido son esenciales. Es lo que hace que este deporte sea tan emocionante Por eso yo me preparo mentalmente mucho antes de cada carrera”, reconoce.
–¿Cuáles son los pasos que estás tomando actualmente para alcanzar tu objetivo de llegar a la élite del automovilismo?
–Competir lo máximo posible, porque así es como se mejora. Y probar hacerlo en los certámenes más prestigiosos, incluyendo la Fórmula 4 y el Campeonato Regional de Fórmula de Oriente Medio. Pero mi objetivo final es ser parte de la Fórmula 1. Es un desafío grande al que sé que puedo llegar. No sólo se trata de talento, sino de encontrar la combinación adecuada de apoyo financiero y asociaciones estratégicas. Necesitas el respaldo de sponsors y colaboradores que crean en tu potencial y estén dispuestos a invertir en tu proyección.
"Es un equilibrio complicado", añade. "Hay pilotos con grandes presupuestos, pero poco talento, y otros con un talento increíble, pero escaso apoyo financiero. La clave radica en encontrar la fusión perfecta de ambas cosas. Ésa es la fórmula secreta para el éxito", define el joven prodigio, quien ha encontrado en el brasileño Ayrton Senna el mejor espejo donde reflejarse.
"Es increíble la dedicación que tenía ese hombre -señala-. Su fanatismo por el automovilismo era contagioso. Ayrton fue un maestro en la pista y una fuente de inspiración para mí", reconoce. Antes de sumar un segundo nombre: el del británico Lewis Hamilton. "Lo que viene haciendo simplemente es increíble ", acierta, antes de cerrar refiriéndose a los fans de su país:
“Son los mejores del mundo, inigualables... Recibo mensajes diarios de jóvenes que me cuentan cómo los inspiro y cómo los motiva a perseguir sus propios sueños. Su apoyo es invaluable", empieza a redondear Joshua, acercando uno de los consejos que se suele repetir así mismo antes de poner primera y salir a las pistas:
"Si quieres ser un grande en lo que haces, es importante que tengas consistencia, perseverancia y disciplina", manifiesta quien quiere, anhela, sueña convertirse en el primer piloto paraguayo en la Fórmula 1.
Fotos: Gentileza de Joshua Duerksen y su team