La actriz María Eugenia Molinari llegó la fama luego de iniciar a trabajar con Julián Weich en el programa de televisión infantil El Agujerito sin fin. Luego de varios años de fama en donde logró armar una sólida carrera en la televisión argentina, decidió alejarse de los medios e inició una nueva vida de la mano de una profesión totalmente diferente a la actuación.
A sus 40 años, decidió adentrarse en el mundo de la astrología. “Empecé a estudiar hace unos años, me gustó muchísimo y me recibí. Es uno de esos mundos en los que si uno entra no sale más”, contó la actriz, sorprendiendo a sus seguidores.
“Empecé y dejé. Relaciones públicas, Dejé. Periodismo, Dejé... porque con Cablín me di cuenta que lo que me gustaba comunicar eran las cosas de color y a su vez el canal empezó a funcionar muy bien, era algo que me gustaba, no por lo mediático, sino desde lo lúdico, trabajar haciendo algo que te gusta, y encima ganaba plata siendo chica”, contó.
A pesar de encontrarse lejos de los medios de comunicación, se mantiene muy activa en sus redes sociales, más precisamente en su cuenta de Instagram, donde recibe consultas de sus seguidores: “Hay gente que te llama por una carta natal y al final te dice ‘sabés que te veo muy parecida a una chica que trabajaba en este programa’”.
Si bien no descarta regresar a la televisión, hace poco se conoció rechazó la invitación a participar de El Hotel de los Famosos (eltrece). “Dije que no por mi timidez y miedo a la exposición. Los seres humanos somos crueles y uno tiene una estructura más sensible, tendría que estar encerrada, además del juego que hay que saber jugar, la competencia y la manipulación”, explicó.
Además, aseguró que no tiene intenciones de mezclar la actuación y la astrología. “Surgió la posibilidad, pero son dos cosas en mi vida que no quiero que se toquen, una cosa es trabajar en una consulta, donde puedo acompañar en la búsqueda, no porque yo resuelva nada, sino que el trabajo humano me gusta, pero es algo a lo que hay que darle un tiempo para poder desarrollar”, aclaró.
Respecto del plano personal, está en pareja y no tiene hijos. Sin embargo, disfruta de sus sobrinos. Los más grandes, que rozan los 18 años, llegaron a verla en Disney junto a Topa.