A sus 86 años, el empresario de medios Constancio Carlos Vigil falleció tras tomarse un avión de línea rumbo a la costa Este de Estados Unidos, donde esperaba ver jugar a la nueva estrella del Inter de Miami, el argentino Lionel Messi. Esa clase de viajes era algo habitual para el experimentado editor, especialmente cuando se trataba de fútbol, una de las pasiones del exdirector ejecutivo de la legendaria revista El Gráfico.
Su vuelo, el AA900 de la compañía American Airlines, despegó del aeropuerto internacional de Ezeiza el viernes a las nueve menos diez de la noche. Al otro día esperaba ver a Jorge, el padre del titular de la selección nacional que el año pasado se quedó con una merecida Copa mundial, pero aún no habían confirmado la hora. Se despertó minutos antes de que la azafata le trajera el desayuno, el que aceptó con mucho gusto. Luego volvió a dormirse, faltaban pocas horas para arribar al aeropuerto de Miami. Don Constancio no volvió a abrir sus ojos.
Tal como lo establecen los protocolos, los médicos del aeropuerto se ocuparon de llevar el cuerpo, que ya había sido bajado del avión sin vida, al hospital más cercano para que se constate el fallecimiento, en este caso fue el Jackson Memorial de Miami. Pero quien más sabe cómo fueron las últimas horas del empresario es Vladimir, su chofer, que lo acompañó en la misión.
Vigil era uno de los nietos del fundador de Editorial Atlántida y formó parte de la compañía familiar. Siempre le gustó lo que hacía y llegó a dirigir algunas de las publicaciones del sello dedicado a los libros y revistas. El mundo de los medios de comunicación lo atrapó a tal punto que fue uno de los dueños de Telefé y Radio Continental, entre otras señales.
Su muerte generó un hondo pesar entre sus familiares y amigos. Por estas horas debe estar llegando a Estados Unidos su esposa, Liliana Pata, y Víctor González, colaborador y socio de Vigil en diferentes negocios, para organizar la repatriación de sus restos.
El octogenario editor llevaba una vida muy activa y siempre tuvo una buena salud, más allá de la cicatriz que le recordaba que llevaba puesto un bypass desde hace unos veinte años y del episodio de leve arritmia del año pasado. Semanas antes de su último viaje participó de un torneo de golf, otra de sus paciones: Integró la Comisión Directiva del Buenos Aires Golf Club, fue miembro del Membership Committee de La Gorce Country Club de Miami y presidente del Buenos Aires Country Club A.C.
Al igual que muchos empresarios argentinos, Vigil decidió irse a vivir a Uruguay en 2020, durante la pandemia de Covid. Él y su familia siempre veraneaban en Punta del Este, lugar donde finalmente se instaló junto a su actual esposa y sus dos hijos menores.
Tenía seis hijos y 10 nietos. De su primer matrimonio con Ana María Baudrix, nacieron Constancio (59), Pilar (58), Mary (56) y Pablo (52). Con su segunda esposa, con quien se casó en 2007, habían decidido ser padres a través de subrogación de vientres. Así, nacieron Emma Celeste, de 2 años, y Carlitos, de casi un año.
Una vida dedicada al arte de comunicar
Nació el 22 de diciembre de 1936 y desde 1954 fue parte de Editorial Atlántida. Llevaba el mismo nombre que su abuelo, el fundador de la firma y autor de libros infantiles. La diferencia entre él y su abuelo estaba en la C del segundo nombre, Cecilio era el de su abuelo y Carlos el suyo.
En 1963, asumió la dirección ejecutiva de varias publicaciones. Entre las más destacadas, la del semanario deportivo El Gráfico. A partir de entonces también integró al Directorio de la compañía.
En el año 1971, fue nombrado Director Ejecutivo Canal 13 de Televisión; en junio de 1994 fue nombrado por su amigo Joao Havelange "Miembro del Media Committee de la F.I.F.A." - Fédération Internationale de Football Association. Dos años más tarde, en 1996, luego de que Editorial Atlántida incrementara sustancialmente su participación en el Grupo Federal de Comunicaciones, fue designado C.E.O. de la compañía.
A fines de 1998 una sociedad integrada por los mismos accionistas de Atlántida Comunicaciones adquirió el 50% de Prime Argentina S.A., y luego de varios meses de intensas tratativas, en mayo del año 2000, el C.E.I. y Constancio C. Vigil vendieron a Telefónica Media de España todas las operaciones de ATCO vinculadas a televisión y radio: el 100% de Telefé y sus ocho estaciones del interior del país, el 50% de Azul TV y sus tres estaciones en el interior del país, y el 100% de Radio Continental.