Jazmín Beccar Varela en +GENTE: "A la Jazmín del 2018 le diría que todo este dolor se va a transformar en algo increíble" – GENTE Online
 

Jazmín Beccar Varela: el autodescubrimiento de una rebelde y su lucha por las madres no gestantes

En el primer episodio de la segunda temporada de +GENTE, la ex Rebelde Way cuenta cómo encontró el amor con una mujer y armó una familia ensamblada y diversa.
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En su podcast Imperfecta, Jazmín Beccar Varela repasa varios puntos de inflexión en su vida luego de haberse convertido en una figura televisión tras habitar la piel de Luján en Rebelde Way, cuando tenía 16 años. Como el momento en el que se alejó de la actuación para estudiar abogacía o cuando descubrió que le apasionaba la comunicación y cambió de carrera, otra vez, para estudiar periodismo. Pero el quiebre más intenso a nivel personal ocurrió en 2018: cuando después de una década de relación con Franco Stivala, luego de un año de matrimonio y cursando el embarazo de su primer hijo, la pareja se disolvió.

Fue un momento devastador. Jazmín, con 33 años, tuvo que aferrarse a sus afectos y duelar la relación, el proyecto de vida conjunto, la idea de familia que habían construido. De ese derrumbe salió fortalecida, encarando la maternidad de Tito, encontrando una armoniosa copaternidad con su ex y, sobre todo, redescubriéndose a sí misma.

Jazmín Beccar Varela encarnó a Luján en Rebelde Way. Es la primera protagonista de la segunda temporada de +GENTE. Foto: Fabián Uset.

A 5 años de aquel cimbronazo, Jazmín está en pareja con la abogada Sofía Accattoli, con quien volvió a apostar al amor y a la maternidad. En mayo de este año tuvieron a Simona, de la que Franco, el papá de Tito, es el padrino. Juntos forman una familia diversa, que comparte cumpleaños, fiestas y vacaciones. “Es la felicidad plena”, dice Jazmín en diálogo con Celeste Montanari en el marco de la segunda temporada de +GENTE.

Jazmín Beccar Varela y Celeste Montanari, conductora del ciclo +GENTE. Foto: Fabián Uset.

La foto familiar idílica que describe la ex Rebelde Way no está libre de obstáculos: hoy Jazmín pelea porque la justicia le reconozca el derecho a una licencia por maternidad como madre no gestante, hasta ahora un punto ciego legal que no contempla su formato de familia ni el de muchas otras personas, algunas menos privilegiadas. “Por eso estamos empezando esta lucha”, cuenta.

Gente: ¿Cómo fue replantearte tu proyecto de vida mientras estabas cursando un embarazo?

Jazmín Beccar Varela: Yo había estado en pareja durante 10 años y decidimos casarnos. Hicimos todo como teníamos que hacerlo. En ese momento uno tiene la estructura mental de que había que convivir, casarse y después quedar embarazada. Buscamos por un año tener un hijo y algo pasó en el medio que todavía no entiendo. Lo hablé un montón con Franco, pero seguimos sin entenderlo: él decide separarse. Obviamente tendrá sus razones. Se desenamoró, y está bien. Yo siempre jodo con que tuvo mal timing, pero igual lo agradezco porque de todo eso saqué muchísimo aprendizaje. Realmente para mí fue una decisión que él tomó, que yo mucho tiempo después pude… no entender, pero sí acompañar. Como la decisión no era mía y yo tenía un bebé en la panza, no tenía mucha más alternativa. Quería seguir el curso de ese embarazo porque lo había buscado. Entonces me enfoqué en Tito, en eso que estaba ok.

G: ¿Cómo hiciste?

JBV: Agarré manos de donde me tiraban: mis amigas, mi familia, mis compañeras de trabajo. Fue espectacular el lazo que tuve, la red de contención. Me cambió radicalmente en todo, en mi forma de pensar, en mi forma de desestructurar muchas cosas. En mi ambiente era medio fracaso pensar en una separación, ni hablar aceptarlo en un momento de embarazo. No te voy a decir que en un primer momento no sentí vergüenza, pero una vez que entendí que tenía tanto amor alrededor, lo afronté, seguí y me hizo cambiar mi forma de pensar. Me hizo darme cuenta de que era muy fuerte, que podía afrontar un montón de cosas sola. Y me hizo conocerme a mí. Ahí empezó un nuevo camino. Empecé a darme cuenta de un montón de cosas que me habían pasado en la vida. Me ayudó a conocerme a mí.

"A la Jazmín del 2018 le diría que va a estar todo bien, que sea fuerte, que todo se va a acomodar"

G: En el dolor pudiste repensarte.

JBV: 100%. Yo creo que de los dolores, de lo más profundo, uno renace. Y elige también cómo renacer. Tenés mil posibilidades y está en uno decidir dónde quiere ir. Insisto: siempre con ayuda y con acompañamiento. Y no es para nada fácil. Yo no la pasé bien, pero me ayudó mucho también tener a Tito, que era como mi cable a tierra. Tenía que estar bien por alguien más. Cuando entendí que yo no manejaba nada de lo que estaba pasando más que lo que me pasaba a mí, ahí empecé a tomar las riendas de qué quería hacer con mi vida. Y tampoco hice la gran cosa. Simplemente, sobreviví a estar separada, embarazada y a saber que tenía que seguir adelante por alguien más.

Cómo Jazmín Beccar Varela salió del closet y volvió a encontrar el amor con Sofía Accattoli

Hoy, tras casi cuatro años de relación con Sofía Accattoli y mucho autoanálisis retrospectivo, Jazmín puede identificar partes de su historia en las que puede ver que no era hétero. “Yo miraba programas de televisión de chiquita tipo ‘Verano del 98’ y tal vez la persona que me gustaba era la mujer y no el hombre”, recuerda. Y continúa: “Evidentemente, hubo algo -la estructura, el tabú, como quieras llamarlo- que tapó en mí todo esto, y seguí mi camino”. 

Tras la separación de su exmarido y un tiempo después del impacto del nacimiento de su hijo Tito, Jazmín se abrió a explorar aquello que no había considerado: “Empecé a mirar también un poco fuera de lo que venía mirando y a permitírmelo. Las mujeres me gustaban, me interesaban y sentía que conectaba mucho más. Desde la charla, desde lo físico, desde lo intelectual”. 

G: Conociste a Sofi por Instagram, ¿cómo fue?

JBV: Fui a comer con dos amigas que son públicamente lesbianas y están casadas entre sí, Valen (Godfrid) y Sofi (Elliot). Y Sofi (Accattoli) mi mujer, mi actual mujer, me comenta una historia de ese momento con un fueguito (N. de la R.: en relación a las stories de Instagram). No sé por qué en mi interior dije: “Evidentemente, entendió que me están gustando las chicas”. Yo no sabía si a ella le gustaban, pero fue intuición. Yo me fui de viaje por trabajo y desde el viaje empezamos a hablar. Cuando volví a Buenos Aires, la invité a salir yo. Pero la invité a tomar un café a las 3 de la tarde. Un desastre, no sabía ni qué tenía que hacer. Tomamos un café y después vino para casa. Y después de ahí nunca más nos volvimos a separar.

Jazmín Beccar Varela y Sofía Accattoli están en pareja desde hace cuatro años y son mamás de Simona. Foto: Instagram.

G: ¿Hubo un momento en el que tuviste que autoaceptarte y salir del closet?

JBV: Me costó contárselo a algunas personas en particular. Yo ya lo había aceptado hacía rato. Desde antes de conocer a Sofi ya lo hablaba con mi mejor amiga, que es la madrina de mi hijo varón. Lo hablaba con mucha gente y hasta a mi familia les decía “si ustedes me ven con una mujer, no se sorprendan”. Estaba segura de que mi próxima pareja iba a ser una mujer. Venía tanteando el terreno. De hecho, cuando le dije a mi mamá, me contesta: “Ya nos habías avisado”. Me costaba más con el padre de mi hijo. 

G: ¿Cómo fue esa charla?

JBV: Para mí esa fue la barrera más fuerte que tuve que pasar. “Tengo una pareja mujer”: esa fue mi charla. Mi mayor miedo era que no sabía con qué tipo de hombre me estaba encontrando. Porque yo conocí a un hombre y después dejé de conocerlo, por supuesto. Es un padre que podía llegar a estar dolido por alguna razón, y no sabía qué esperar. Mi mayor miedo era su rechazo, o que me sacara mi hijo desde la postura de “no quiero que mi hijo tenga una mamá lesbiana”. Nada de todo eso pasó. Fue más como ¿cómo no se lo dije antes? ¿cómo pasé tanto tiempo sin contarle esto? La verdad es que no había pasado tanto tiempo. Fue en pandemia y tenía que contarle que su hijo estaba conviviendo con otra persona, además de mí. Ese fue mi mayor miedo. Ni en el trabajo, ni en mi familia, ni con mis amigas, por supuesto, nunca tuve miedo. Una vez que pasé esa etapa fue como: “Ya está, tengo todo lo que necesito a mi alrededor. Lo que opine el resto del mundo no me importa, para nada”. Ahora Sofi ya es una más y Simona también, por supuesto. Somos Sofi, Simona, el papá de Tito, Tito... estamos todos metidos en una misma familia. Pero fue una construcción, porque yo ya estaba segura.

G: ¿Tu relación con Sofi fue lo que te confirmó que no eras hetero?

JBV: Yo me enamoré de otras mujeres antes (...). Bueno, es que, de hecho, de ahí es donde me vengo dando cuenta que me gustan las mujeres. Sofi no es la primera mujer de la que yo gusto. Y si te ven feliz… yo me acuerdo, el comentario de mis amigas era: “¡Qué me importa si es mujer o varón, volviste a brillar!”.

Vestite como quieras, vestite para vos: Skip cuida el poder de tu ropa

En línea con una filosofía que invita a derribar los mitos construidos alrededor de las construcciones sociales, el género y la indumentaria, Skip acompaña la segunda temporada de +Gente matcheando con la narrativa “vestite como quieras, vestite para vos.”, de la que hace bandera la marca.

La llegada de Simona a una familia con dos mamás y la lucha de Jazmín por las licencias de las no-gestantes

El crecimiento de la relación de Jazmín y Sofía fue rápido e intenso. Se mudaron juntas en pandemia y la convivencia dio lugar a la posibilidad de tener un bebé juntas. Para que Sofía quedara embarazada recurrieron a un tratamiento que involucró un donante de esperma anónimo. Todo marchaba bien hasta que, antes del nacimiento de Simona, cuando llegó el momento de establecer en el trabajo de Jazmín su licencia por maternidad, apareció un obstáculo. 

La ley establece 90 días obligatorios de licencia cubiertos por la ANSES para las personas gestantes y de solo 2 días para padres o lo que se considera cuidadores secundarios‘. “Presenciás el nacimiento de tu hijo y volvés a trabajar al otro día. Sos una persona que acompaña a su mujer a parir”, dice Jazmín. “La compañía para la que trabajo ofrecía un beneficio por ser ‘cuidador secundario’. Y ahí es donde yo me empecé a sentir incómoda, y cuando me siento incómoda tengo que mover la cola y tengo que empezar a tocar puertas”, explica Beccar Varela.

"Nunca imaginé que iba a volver a vivir este momento… no puedo estar más agradecida", dice Jazmín Beccar Varela en el posteo de Instagram. Foto: Instagram.

Con la convicción de que su rol en la crianza de Sofía no era el de una ‘cuidadora secundaria‘ sino el de una madre no gestante, Jazmín inició una travesía burocrática que implicó un juicio al ANSES: “Ganamos la primera instancia. O sea, el juez de primera instancia nos dio la razón. Yo buscaba este tiempo con mi hija, los primeros tres meses que tiene el derecho cualquier mamá de pasarlo, porque hay que entender que la licencia no es solamente para la puérpera y para recuperarse. Es una parte de la licencia, por supuesto, pero además es por el tiempo que el bebé necesita”.

Mientras espera la sentencia de cámara, que sentaría jurisprudencia para otros casos como el suyo, Jazmín reconoce que podría haber aceptado el beneficio de la empresa para la que trabaja, pero reconoce que es un privilegio que muy pocas empresas ofrecen: “Hay muchas personas que no lo tienen. Por eso estamos empezando esta lucha”.

Una familia diversa, ensamblada y feliz

G: ¿Cómo vas navegando como mamá el hecho de vivir dentro de una familia diversa con un nene de cuatro años que te pregunta cosas?

JBV: Tito hace preguntas. Primero me preguntó si su papá era el papá de Simona. La primera respuesta fue no. “¿Y por qué?” “Porque Simona tiene dos mamás. Como vos tenés mamá y papá, Simona tiene dos mamás”. “Bueno, pero yo quiero que papá sea el papá de Simona”. “No, Simona tienes dos mamás”. “¿Entonces papá puede ser el padrino de Simona?”, fue la pregunta que hizo. Con Sofi ya lo habíamos hablado porque Sofi tiene dos madrinas. Entonces dijimos “‘pará, esto está bueno”. Franco va a estar en la vida de Simona toda la vida igual porque es el papá del hermano. Estábamos con Franco y le dije a Tito: “¿Le querés preguntar algo a papá?”. “Sí. Papá, ¿Vos querés ser el padrino de Simona? “Franco me mira y me dice: “¿Esto es verdad? ¿Me la tomo en serio a esta pregunta?” Y le digo: “Sí de verdad, ¿querés ser el padrino de Simona? Tito quiere, nosotras estamos felices”. “Obvio. Me encantaría”. Ahí fue la primera pregunta saldada ya bien. 

Transparente, nunca invisible

La producción de las cápsulas de la segunda temporada de +GENTE se llevaron a cabo con el apoyo de Absolut, una marca que desde hace más de 40 años trabaja sobre la diversidad con la intención de construir un mundo libre de etiquetas.

G: ¿Y cómo es que tu ex abrace el hecho de que encontraste el amor y el producto de ese amor?

JBV: Es una felicidad plena. Para mí fue una gran emoción. Pero me puse a pensar que naturalicé cosas que a mucha gente les parecen increíbles y para mí es “wow, esto está sucediendo sin que yo lo haya luchado”.

G: ¿Qué le dirías a la Jazmín del 2018?

JBV: Que va a estar todo bien, que sea fuerte, que todo se va a acomodar, que todo ese dolor por el que está pasando va a pasar y que va a estar mucho mejor de lo que se imagina. Que va a encontrar mucho amor y que todo este dolor se va a transformar en algo increíble y que va a vivir el mejor momento de su vida dentro de unos años. Que tenga mucha fe.

Redactó para GENTE: Gabriel Orqueda.

Muebles: @tiendafc / Alfombra: @thecarpet.co / Makeup: George Rodriguez y Yamila Boniti para @hairmalambo

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