Ludmila Isabella denunció por violencia y torturas a Lautaro Acosta, el ídolo del club Lanús. Esta denuncia llega días después de que terminase una relación que definió como "tóxica". La exesposa del jugador, también madre de Benicio –único hijo entre ambos–, ratificó su denuncia ante la Justicia y habló con los medios de comunicación que la esperaban a la salida.
"No me siento bien porque recordar todo lo que viví fue duro. Ahora me dieron un tiempo para poder tranquilizarme y ratificar la denuncia. Recién recibí asistencia a la víctima con una psicóloga", fue lo primero que dijo Ludmila.
Acerca de cómo fue la situación límite que terminó con la relación, explicó: "Yo me fui a cenar con mis hermanas y él por sus celos me dijo 'Si vos te vas por esta puerta nos separamos, no entrás nunca más a la casa, perdés tus cosas y las de Benicio'... y yo me fui igual".
Cuando le preguntaron si era la primera vez que vivía una situación similar, Ludmila Isabella explicó que ya se lo había dicho antes, pero que ella siempre se quedaba. Sin embargo, "esta vez decidí irme porque estaba cansada", explicó.
Luego, la exesposa de Acosta añadió: "Todo pasó el miércoles pasado a la noche, y es difícil hablarlo porque viví cosas muy feas. Al tener una relación tóxica no podía soltar y el vínculo que nos quedaba hacía que no quiera contar lo que realmente pasé".
Por último, Ludmila dijo: "También por eso mi denuncia fue muy leve. No conté lo que realmente vivía, todas esas madrugadas... las noches de terror", cerró Isabella rompiendo en llanto refiriéndose al maltrato que le propinó Lautaro Acosta.
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