La ex diputada Romina Uhrig fue una de las participantes más criticadas de Gran Hermano. Si bien Romina llegó casi a la final, muchos seguidores del reality show -que causó furor en Argentina- le recriminaban que haya dejado a sus 3 hijas para entrar a la casa de Gran Hermano. La ex hermanita, quien tiene tres hijas menores de edad, fue fuertemente criticada por haber permanecido tantos meses a la casa y ella, ya cansada de dar explicaciones sobre su maternidad, salió a responder las criticas.
En el programa conducido por Rodrigo Lussich, Socios del Espectáculo, Uhrig aseguró que aun recibe comentarios sobre la crianza de sus hijas menores Mía y Felicitas, principalmente. "Son mayormente las mujeres las que me critican, y si yo estoy de un canal a otro o programa es porque estoy trabajando, y sin embargo me mandan a cuidarlas. Es tremendo escuchar lo que me dice alguna gente y ya hace dos meses salí de la casa" aseguró.
"¿Quien no quiere ganarse una casa? No seamos hipócritas. Pero yo entré más por un deseo personal, algo que yo quería desde chiquita. Quería ser actriz, era algo que yo quería ser y ahora estoy metiéndole a la condición, ser famosa", explicó sobre su decisión de entrar al reality show.
La contundente frase de Romina Uhrig de Gran Hermano: “No pensé que iba a ser juzgada como mamá por estar en el programa”
Después de dejar la casa de Gran Hermano, Romina Uhrig sigue visitando diferentes programas para contar cómo fue su experiencia y meterse de lleno en el vínculo que tiene con Walter Festa. La exparticipante del reality de Telefe lamentó haberse enterado de los comentarios negativos de las personas que juzgaron su ingreso al encierro teniendo hijas menores de edad.
“Lamentablemente el país es muy machista porque si dejamos a nuestras hijas, a la mujer la condenan mucho. Es en todos los casos, pero al hombre no. Por suerte tuve el apoyo de muchas mujeres que remarcaron que las nenas se quedaron con su papá. Para mi tampoco fue fácil”, explicó en diálogo con Verónica Lozano en Cortá por Lozano en Telefe.
“Yo entre a Gran Hermano separada y lo vi como una gran oportunidad. Quería ver cómo me iba. Yo lo consulté con él, estaba de acuerdo y me acompañó al primer casting”, dijo al recordar que la separación se dio en el medio del proceso de ingreso al ciclo de Santiago del Moro.
Sobre las versiones que indican que tiene un buen pasar económico y un abultado sueldo de la política sin trabajar, apuntó: “Ayer se dijo eso. Yo estaba mal porque me guardaba un montón de cosas para que no se tomen de esto. Antes de entrar renuncie a mi trabajo. Hoy vi que cobraba un sueldo de 300 mil pesos. Jamás fue así. Si me sobraría no me pondría a trabajar haciendo uñas”.
“Lo único que es verdad es que tenía un lote a mi nombre en donde íbamos a hacer la casa, pero que no se hizo porque nos estábamos separando. Antes de entrar al reality le firmé lo del terreno y la camioneta y dije ‘ya está’. Yo sé que ahora Walter alquiló una casa. Eso me tenía muy preocupada, pero no lo quería hablar porque lo toman como que soy una pobrecita”, agregó.