Este fin de semana regresó uno de los festivales más importantes del país: el Cosquín Rock 2023, el evento que reúne a las bandas más destacadas de la escena local e internacional y que volvió con un line up de lujo que tuvo a emblemáticos referentes. Durante su segunda y última jornada Fito Páez, Ciro y Los Persas y Dillom fueron algunos de los artistas que se impusieron con sus performances en las sierras cordobesas.
Como cada año, el festival tuvo lugar en el Aeródromo de Santa María de Punilla, Córdoba, y más de 200 mil personas dijeron presente durante las dos fechas. Cosquín Rock se despidió de su 23ª edición con varios contrapuntos generacionales y artísticos, que concluyeron con el gran cierre de Tiësto, el Dj holandés.
Con el sol del atardecer, Fito Páez siguió celebrando los 30 años del El amor después del amor, álbum que cumplió su tercera década en 2022 y que en marzo tendrá al rosarino sobre el escenario del estadio Vélez Sarsfield. Con su cancionero popular hizo emocionar a más de una generación y se convirtió en una de las principales atracciones de la segunda fecha del festival.
Apenas unas horas después, Ciro Martínez desembarcó con su banda y alternó canciones de su etapa 'persa' con clásicos de Los Piojos -"Tan solo"; "Como alí"-. Además, hubo lugar para el romanticismo en clave trovador cuando le dedicaron canciones a una tal 'pelirroja que me hizo sufrir'. Así pasaron "Y quemas" y "Gris", también de la etapa piojosa, que finalizaron con "Te diría".
A las 20, mientras Las Pastillas del Abuelo tocaban en el Norte, el escenario Montaña recibía a Bandalos Chinos, con un show muy celebrado y coreado por el público que demostró que ya merecen un lugar entre los artistas principales, luego de su sexta participación en el festival.
Con algo de demora, Dillom salió al escenario Norte al ritmo de "Demian", "Pelotuda" y un mashup de "Una vela de Intoxicados" con "Rili rili", todas se su exitoso álbum Post mortem. Con una audiencia algo ya cansada, pero de hierro, Las Pelotas cerraron uno de los escenarios principales mientras que del otro lado Ca7riel y Paco Amoroso demostraron su versatilidad en un sentido artístico que recuerda un poco a Illya Kuryaki and the Valderramas.
El cierre de esta nueva edición del Cosquín Rock estuvo a cargo del set electrónico de Tiësto, el DJ neerlandés que comenzó minutos después de la 1 con un largo repertorio en el que incluyó algunos guiños para el público argentino, como una reversión del hit de Bizarrap y Quevedo y una impactante puesta de luces y visuales.
Una vez más, el festival de las sierras cordobesas dejó un fin de semana para el recuerdo y reafirmó la importancia de continuar manteniendo -y abriendo- nuevos espacios para la música nacional e internacional.
