El presidente Alberto Fernández minimizó la interna que hay dentro del Frente de Todos (FdT), dejó abierta la posibilidad de presentarse a la reelección y aseguró que la problemática de la inflación “no se resuelve de un día para el otro”. Las afirmaciones del mandatario se dan en un clima de tensión dentro del oficialismo, pero al mismo tiempo de suspenso ante la conformación de una mesa política en donde se discutirán los pasos a seguir frente al año electoral.
“A mí nadie me dijo si me puedo presentar o no (a la reelección). Mi mayor problema no es que vuelva a ser Presidente, mi problema es que algún canalla que manejó la Argentina no vuelva”, dijo Fernández esta mañana durante una entrevista con radio Urbana Play.
Tomó distancia de las internas. Fernández no quiere dedicarle “ni un segundo” a debatir las diferencias internas en el Frente de Todos y minimizó las diferencias con el ministro del Interior: “Pregunten a Wado de Pedro, yo soy el Presidente. Yo sé con quién puedo gobernar y con quién no. Sigo gobernando”.
Sobre la mesa política que convocó en domingo, explicó que tendrá el objetivo de “discutir cómo se van a resolver las internas del FdT y cómo funcionarían las PASO en sus distintas alternativas”. También reivindicó las PASO como mecanismo para dirimir las candidaturas. Hay que dejar “que la gente opine” ,“profundizar la democracia”, porque –según su opinión– el país “tiene un historial de personalismos”.
De algún modo, el jefe de Estado le bajó el precio a los sondeos electorales al señalar que quiere hablarle “al 30 o 40 por ciento de la gente que no opina en las encuestas para llamarles su atención” porque le “importa” lo que piense ese sector del electorado.
Fernández reconoció que con la vicepresidenta Cristina Kirchner tiene “miradas diferentes, pero los dos queremos lo mismo” y aclaró que pese a “tener diferencias, lo que no tenemos es derecho a dividirnos”.
Habló de la “eterna gratitud” que tiene por Sergio Massa porque “siempre estuvo al lado mío ayudándome” y destacó que el ministro de Economía “puede ser candidato”. Lo que dejó claro es que más allá de quién sea el candidato del oficialismo: “el problema es que no vuelvan los que destruyeron la patria”.
Situación económica
El Gobierno está “luchando permanentemente contra la inflación” dijo Fernández, aunque aclaró que es un fenómeno “que no se resuelve de un día para el otro”. Inmediatamente, como suele hacer el oficialismo, apuntó sus cañones a Juntos por el Cambio al recordar que el expresidente Mauricio Macri “dejó un 54% de inflación y en el medio se desató una guerra (entre Ucrania y Rusia) que en algunos países del mundo multiplicó por ocho la inflación y en Argentina la multiplicó por dos”.
Volvió a repetir que la inflación es un fenómeno “mutlicausal” y después de pasar el capítulo de las responsabilidades de macrismo pasó a las “circunstancias exógenas, como la guerra y endógenas, que tienen que ver con una puja distributiva”.
Entre sus argumentos, Fernández dijo que tiene todas las intenciones de “erradicar” la inflación “pero no puedo mentirle a la gente. Recibí 54 puntos de inflación, 150 mil millones de dólares de deuda y el día 99 (de Gobierno) una pandemia que duró dos años. Cuando termina eso, a Rusia se le ocurrió invadir Ucrania”.
Para el mandatario, las cosas no están tan mal: destacó que se crearon “1.600.000 puestos de trabajo, de los cuales 600.000 son registrados” y señaló que Argentina “lleva 22 meses consecutivos de crecimiento del empleo registrado”.
Fernández rechazó que el acuerdo con el FMI para la refinanciación de la deuda haya provocado un “ajuste” en la economía argentina. “Nuestra inversión en desarrollo social es el 1,2% del PBI, tenemos 5.800 obras públicas en marcha y 2.900 obras públicas entregadas”, argumentó.
Pulseada en el Congreso por la Corte
Fernández volvió a apuntar contra los jueces de la máxima instancia judicial del país. “El Poder Judicial, la Corte, dictó dos decisiones que fueron claras intromisiones al Poder Legislativo y al Ejecutivo” y “no está para legislar sobre el Consejo de la Magistratura, ni para designar representantes del legislativo en el Consejo, ni para decidir sobre la coparticipación”.
En ese sentido, la iniciativa de enjuiciar a los miembros del tribunal supremo no prospera en el Parlamento “una vez más comprobaremos que Cambiemos (Juntos por el Cambio) los protegerá”.
