El Pollo Álvarez vivió una confusa situación desde Qatar, en donde se encuentra cubriendo el mundial de fútbol para Nosotros a la mañana (eltrece). En medio de la transmisión desde Barwa Village, una de las zonas humildes de ese país, una camioneta quiso pasar y el argentino le hizo un gesto para que haga su movimiento.
Sin embargo, el conductor se bajó del automóvil y se acercó al Pollo exigiéndole su credencial que lo habilita a filmar en las calles qataríes, mientras bajaban la cámara de un modo prepotente.
No fue una situación habitual, ya que varios de los residentes y turistas del lugar comenzaron a filmar con sus propios celulares la situación que se vivía a espaldas de la cámara. Se habló primero de censura y luego de su situación de "retenido", tal como lo anunció el programa para el que trabaja.
Las repercusiones después del incómodo momento de El Pollo Álvarez
Guillermo Nicolás, embajador argentino en Qatar, aseguró que no debería haber inconvenientes ya que cuentan con todas las aprobaciones necesarias para realizar el trabajo desde allí. Además, se puso a disposición de lo que necesite el equipo de eltrece.
Por su lado, el Pollo Álvarez dijo que fue incómodo, pero que igual quiere "bajarle la espuma" al asunto para concentrarse en la cobertura de los partidos de la Selección Argentina.
No solo vivió un incómodo momento cuando le exigieron la credencial sino que, después de moverse de la zona hacia un lugar más desértico, continuaron hostigándolo con la intención de que termine la transmisión.
La palabra de Nico Magaldi: "Pensamos que se lo llevaban detenido"
Desde Buenos Aires, Nicolás Magaldi está cuidándole su lugar a El Pollo Álvarez en la conducción de Nosotros a la mañana. Con el deber de mantener el aire funcionando, llevó adelante la difícil tarea que sorprendió a todos en la pantalla de eltrece.
"Pensamos que se lo llevaban detenido", le confió a GENTE. "Esto es un poco el reflejo de las restricciones en un mundial totalmente violento con la libertad", señaló, disgustado por el momento vivido que le tocó pilotear desde el otro lado del océano.