Lizy Tagliani se caracteriza por ser muy divertida y es por eso y su simpatía que es muy querida por la gente. Pero no siempre sus bromas terminaron bien. Durante su presencia en PH Podemos Hablar, la conductora confesó que ideó una pequeña broma a su compañera de piso que casi termina muy mal.
Una de las primeras preguntas de la noche consistió en contar si alguna vez habían realizado una broma pesada a alguien. Claramente, Lizy fue una de las primeras en adelantarse al circulo y reveló que hubo una con la que cruzó el límite y se arrepiente de haber hecho porque consistió en fingir su muerte.
Su víctima fue Noemi, una amiga que vivía con ella y con la cual solían hacerse varias maldades divertidas entre las dos. Un día a Tagliani se le ocurrió que su broma sería fingir su suicidio en el monoambiente donde convivían. Para poder lograrlo ideó todo un mecanismo: "Estaba la bañera, la ducha, un cajón peruano...Veo todo esto y era la escena del crimen perfecto", dijo la conductora.
"Puse el cajón peruano adentro de la bañera, tiré la cortina con el barral tapando todo el cajón. Agarré un cinto, lo colgué de la ducha y yo me lo puse como en el cuello como ahorcada", explicó Lizy, generando la sorpresa de los demás invitados. Cuando su compañera llegó al departamento, lo primero que hizo fue cocinarse comida, por lo que Tagliani tuvo que estar esperando en el baño durante bastante tiempo.
Hasta que su amiga decidió ir al baño y la encontró a Lizy en esa posición. Al ver esta escena, Noemi cayó de lleno en la broma y lanzó un grito desesperado al pensar que la conductora se había quitado la vida. "Ella no podía parar de llorar, nunca entendió que yo estaba viva", confesó la invitada, especificando que apenas su amiga la vio, ella le reveló que estaba bien.
"No sé qué le pasó por la cabeza pero me contó toda su vida, desde que nació hasta que reaccionó", dijo Lizy y contó que tuvo que callarla porque los gritos eran tan fuertes que las podían llegar a echar del departamento. Aunque esta broma pesada pudo haber terminado peor, Tagliani confesó que como estas anécdotas tiene un montón para contar.
