Flor Vigna y Luciano Castro conforman una de las parejas más divertidas del último tiempo del mundo del espectáculo. Ya llevan muchísimos meses juntos y todo marcha super bien entre ellos. Tal es así, que cada cosa que hacen, llena de alegría a sus seguidores, incluso con los talentos ocultos de Flor, ya que le quiso cortar el pelo a Luciano Castro, pero no todo salió como esperaban.
La conductora compartió en las historias de su Instagram el video que sucedió en pleno verano: en ese momento, se encontraba preparada para cortarle el pelo al actor. Pero, antes de comenzar quiso tirarle con un pulverizador agua en la cabeza, algo que no salió del todo bien, ya que le echó todo el agua en la cara.
Obviamente, la pareja no pudo contener la risa, pero eso no impidió que la conductora de El último pasajero siga con su profesión con la tijera en mano: “Cuando quise ser peluquera”, decía la leyenda de la historia, obviamente, la gracia de su blooper le dio el mejor tinte.
Cómo comenzó la historia de amor
La pareja se conoció en el gimnasio donde ambos entrenaban. "Es genial porque es como la gente que te dice que se conoció en el colectivo, y es muy gracioso porque siempre digo que lo conocí haciendo glúteos", bromea Vigna respecto al comienzo de su relación.
Ambos estaban convocados para comenzar la grabación de una serie que se empezará a filmar en el verano. La actriz se bajó del proyecto debido a que estaba muy ocupada con sus proyectos musicales. "Él se acercó a preguntarme, empezamos a hablar de eso, seguimos hablando, y un día merendamos", confiesa Flor.
El día de su primera cita quedó para el recuerdo en una gran anécdota. La modelo había quedado con Luciano que se encontrarían en la casa de ella para merendar. Mientras ella se preparaba para el encuentro, salió a la calle para recibir al delivery y cuando quiso volver a entrar la puerta se había cerado con su llave adentro.
Vigna contó que se tuvo que ir corriendo a la casa de la mamá que vive a 10 cuadras. Cuando volvió, Luciano ya estaba en la puerta de su casa esperando y ella llegó toda transpirada y con el maquillaje corrido. Después de ese encuentro no se separaron más.