Según comunicaron medios locales, las víctimas del edificio que se derrumbó en Surfside, Florida, el 24 de junio del año pasado, en el que se encontraban la pareja de actores argentinos -y salvaron de milagro- Nico Vázquez y Gimena Accardi, alcanzaron un acuerdo de 997 millones de dólares con las aseguradoras y las partes demandadas.
Sin embargo, entrevistada ayer por Angel de Brito en LAM, Gimena Accardi aclaró que ellos no cobrarán esa cifra millonaria porque no iniciaron acciones legales. "No nos interesó entrar en ese litigio", aclaró la actriz.
Tras el colapso de la Champlain Towers South que dejó 98 muertos, el trato propuesto fue anunciado por un abogado de las víctimas y es por una suma mucho mayor a los números que se habían divulgado en medio del litigio.
Durante el tiempo de litigio, un árbitro designado por un juez intentó zanjar diferencias en los reclamos de las personas afectadas. Ya que, las posturas entre los sobrevivientes y familiares de víctimas mortales complicaron en su momento alcanzar un acuerdo monetario para resarcir los daños, reveló el árbitro, Bruce Greer.
Acuerdo millonario
Según el medio estadounidense, The Miami Herald, el abogado de una de las víctimas les dijo: “Tenemos 997 millones de dólares en acuerdos propuestos ante usted, y podrían ser de 1000 millones para fines de esta semana”.
Asimismo, Carlos Silva, uno de los abogados de los demandantes señaló: “El acuerdo ahora mismo es de 997 millones de dólares. Habrá aproximadamente otros 100 millones de dólares que recuperaremos para las víctimas”.
No obstante, se desconoce hasta el momento cómo será repartido ese dinero entre los residentes del edificio que sobrevivieron, los propietarios de los departamentos y las familias que perdieron a sus seres queridos.
Detalles de la investigación
Cabe mencionar que, la demanda colectiva fue contra varias entidades, entre ellas los constructores de un edificio junto al Champlain Towers South, acusados de contribuir al derrumbe por haber generado vibraciones mientras trabajaban en el terreno adyacente.
Sin embargo, las razones de la catástrofe aún no se han establecido con certeza, pero los primeros elementos de la investigación revelaron que la estructura del edificio parecía estar degradada en algunas partes.
Tras el derrumbe, los bomberos trabajaron durante semanas en busca de posibles supervivientes. Pero, a excepción de un adolescente rescatado horas después del derrumbe, no encontraron a ninguna persona con vida entre los escombros.
El juez encargado del caso, Michael Hanzman, ya había aprobado en marzo un acuerdo de 83 millones de dólares para los propietarios de departamentos en el edificio.