Tras conocerse los resultados de las pericias toxicológicos y luego de que se hallara semen en varias de las prendas que vestían los imputados durante el hecho, los 6 detenidos fueron citados nuevamente a ampliar su declaración indagatoria.
En ese sentido, a excepción de la mayoría, Ignacio Retondo y Franco Lykan no se negaron a dar explicaciones y contaron su versión de los hechos de aquel lunes 28 de febrero que una joven de 20 años fue encontrada por dos testigos siendo abusada en grupo.
Según publicó Infobae, quien accedió a la declaración del imputado, Retondo, oriundo de Vicente López, estudiante de relaciones internacionales de la UNSAM y militante político de una organización kirchnerista -hoy repudiado por su facultad y por el Frente de Todos- decidió hablar por Zoom desde la comisaría porteña donde se encuentra encerrado de lo que sucedió esa madrugada y cómo conoció al grupo de la víctima.
El relato de Ignacio Retondo
Retondo comenzó su relato indicando que se había encontrado con sus “amigos: Franco Lykan y Lautaro Ciongo” (dos de los acusados), además, afirmó luego que “se encontraron el día anterior al hecho todos ellos tipo seis de la tarde, en la casa de un amigo que vive en villa Adelina, adonde suelen ir, donde pintó quedarse a comer unos choripanes, hasta la noche. Después decidieron ir con Lykan y Lautaro a la a casa de Lykan, ahí se cambió Lykan y luego fueron a su casa, aproximadamente a las 3 de la mañana", detalla.
Y agrega: "Se cambió, le pidió quinientos pesos a su padre, él accedió y arrancaron para San Telmo, a Lo de Luca Prodan”, por la casa donde vivía el fallecido cantante de Sumo, convertida en centro cultural.
Luego, se dirigieron a Plaza Serrano, para beber vino, hacer una vaquita para comprar marihuana. Le convidaron cocaína. Tocaron la guitarra en la calle, pidieron monedas. Para luego, dirigirse a la discoteca donde conocieron a la víctima.
De cómo conoció a la joven de 20 años
Respecto a cómo conoció a la víctima, Ignacio Retondo continuó narrando su versión: conoció en la madrugada del hecho a la víctima y a los otros tres detenidos: Ángel Rámos, Alexis Cuzzoni y Thomas Domínguez.
En ese caso, lo que declaró difiere con respecto a lo que contó la joven de 20 años: “Estando en Plaza Serrano, el dicente quiso ir a un baño químico que está ahí. Fue y estaba ocupado. Se queda ahí esperando un rato, vuelve a tocar la puerta y nadie le contestaba. Hasta que abre la puerta y se encuentra con una chica semi desnuda, sentada, apoyada sobre la puerta del baño", especifica Retondo.
En ese marco, el imputado aclara que "automáticamente cierra la puerta y cruza y va a buscar a dos chicas que estaban en la plaza para que le den auxilio porque el dicente no la quiso tocar. Estas chicas la sacan, la llevan a la plaza con ellas y esta chica no paraba de vomitar, se sentía muy mal", detalla el momento en que se cruza con la víctima.
Luego, Retondo cuenta una secuencia por lo menos llamativa. Explica que, ante el estado de la joven descompuesta, llamaron a la policía y al SAME y se la llevaron en ambulancia. Luego, narra que siguió deambulando por la zona con sus dos amigos (Lykan y Ciongo) hasta que ella vuelve a aparecer con los otros tres que luego fueron detenidos.
“Estuvieron ahí un rato tocando y tomando cerveza, hasta que aparecen estos tres pibes con la piba. El dicente no los conocía, a ninguno, tampoco Likan y Ciongo. La chica se acerca le dice que le había gustado mucho una canción que estaba tocando, y nada, le habla sobre la canción y esa fue la única conversación que tuvo con la chica. Ella le preguntó si le parecía linda y le dijo que sí, porque no le iba a decir que le parecía fea, y nada más, eso fue lo único. Estuvieron ahí un rato más, y arrancaron a caminar en la dirección que habían venido, todos”, concluyé.
Qué ocurrió en el Volkswagen Gol
Respecto a lo que ocurrió dentro del Volkswagen Gol, Ignacio Retondo contó que "ve pasar a una mujer de vestido rojo con dos criaturas, y decide ver qué pasaba en el auto y ve a Ciongo con la chica besándose, ella le tocaba la cara, él la pierna y ahí les dijo el dicente que la corten, que había un montón de gente, que se fueran y ahí se vuelve a sentar adonde estaba, a esperar, le pregunta al de rastas si tenía el porro y le dice que lo tenía un amigo que estaba a la vuelta. Ahí el dicente se para, se va a la vuelta, vuelve, le da una pitada y ahí ve que el de rastas se fue para adonde estaba el que supuestamente estaba filmando y el dicente va detrás de él”, afirmó.
En tanto, respecto al acto sexual que observó, "el dicente la vio a ella subirse arriba de él, moverse, estaba apoyada en la parte de arriba de la guantera, lo que sería el torpedo del auto, ponía caras, se veía eso. El dicente le dijo a Ciongo que no daba entrar al auto, los otros decían ‘mira cómo se mueve’, hablaban que querían sumarse, y no sabe por qué Ciongo se subió, no sabe qué le dio", remarcó.
Y continuó relatando: "A la chica la vio inclinarse hacia Ciongo, no sabe si hacia sus genitales o su boca, no lo vio, sólo la vio inclinarse. A preguntas sobre en qué condición la vio a la chica, dice que la primera vez que la vio, la vio bien, hablaba, no la vio tambalearse ni nada, fue el único contacto porque la segunda vez ya caminaba abrazada al chico con el que se subió al auto. Al principio iba caminando bien, charlaba, no la vio mal, como ser re pasada o algo así”.
Además de señalar que técnicamente el encuentro entre la víctima fue consentido, el imputado "se considera totalmente inocente".