Durante al menos una hora una joven de 20 años de edad fue abusada sexualmente en pleno barrio de Palermo Soho por seis individuos. El horror de la escena de la cuál la joven pudo salir con vida por la intervención de los vecinos de la zona no solo dejó en shock a toda la población sino a aquellas personas que consideraban a estos hombres sus amigos.
En el día de ayer durante una de las marchas que se realizaron en la localidad de Munro, localidad bonaerense en la que vivirían algunos de los detenidos, Blanca, Valentina y Melanie, amigas de los perpetraron tan repudiable crimen dieron su testimonio.
“No pensas que algo así puede pasar. Los conocía, compartimos birras juntos, me han acompañado hasta mi casa de noche he estado en estados de vulnerabilidad confiando que no iba a pasar nada y que pase todo esto es impactante”, comentó una de las chicas que decidió ir a la marcha para pedir justicia por una chica que poseía casi su misma edad.
Y continuó, “Nos la pasamos con mis amigas llorando porque vos tenes la imagen de violador como un monstruo pero no, puede estar cenando en tu casa, está en tu cama, está compartiendo risas con vos”
Ante la pregunta del periodista de América Tv sobre si había mantenido algún momento de intimidad con alguno de los atacantes la muchacha reconoció su amistad. “Nos conocíamos hace varios años. Íbamos todos al mismo bar del barrio y nos hicimos todos amigos. No pensas que te vas a despertar un día y van a estar escrachados a nivel nacional por barbaridades semejantes. Si nosotras hubiéramos sabido que eran así jamás hubiéramos compartido ni un ‘hola’”.
Las amigas de los seis detenidos también revelaron su diálogo con los familiares de los sujetos y pidieron que las personas dejen de manifestarse en muchas de las direcciones que comenzaron a difundirse en redes sociales. “Hablé con una prima y pido que de parte de ellas dejen de compartir las direcciones de las casas porque las familias no tienen nada que ver y están muy angustiados. Están pasando por un duelo. Si nosotras nos sentimos así que somos conocidas no nos imaginamos ellos, no esperaban todo esto”.
Por último Melanie identificó señales previas de los abusadores sexuales que quizá nunca se había tomado el tiempo de analizar, “Consumían bastante marihuana y vivían de joda realmente. Entraban en estados de ebriedad al estado de estar inconscientes. Se apagaban puchos en el cuerpo, revoleaban vasos, gritaban. Pero nunca nos dijeron algo concreto”.