La colectiva Periodistas Argentinas emitió en la tarde del lunes un comunicado que llamó a terminar con la violencia laboral a raíz de las denuncias públicas de varias colegas con el conductor del informativo "Buenos días América", Antonio Laje.
Tras el descargo de Antonio Laje por las denuncias de maltrato laboral y violencia que recibió por parte de dos ex compañeras de América TV y A24, el periodista sumó más denuncias de colegas que contradicen sus dichos. Es que, Laje, sostuvo que "nunca ejerció maltrato" aunque reconoció no tener buen carácter y ser muy exigente.
En ese sentido, la primera denuncia vino de la nutricionista Fiorella Viteli poco después de que María Belén Ludueña se despidiera del aire del noticiero entre lágrimas. Siguieron Mai Pistiner y Eugenia Morea. Las periodistas acusaron a su colega y exjefe Antonio Laje de maltratos y acoso sexual.
El comunicado de Periodistas Argentinas contra Antonio Laje
El texto publicado en la cuenta oficial de Twitter de la agrupación Periodistas Argentinas comienza proponiendo: "Exigimos que las empresas de comunicación cumplan con el marco legal vigente que tipifica y sanciona el maltrato laboral y pedimos que el Poder Ejecutivo reglamente en forma urgente la Ley de Equidad en Medios, que es la herramienta que garantiza la erradicación de estas conductas".
En ese sentido, la organización detalló que "en estos días se han conocido testimonios de colegas que dan cuenta de lo que venimos denunciando desde hace varios años, a través de las encuestas que realizamos entre nuestras más de 200 integrantes".
Luego enumeraron las diferentes prácticas o destratos a las que son sometidas algunas de las mujeres que trabajan en los medios de comunicación : "Insultos, humillaciones, acosos, negación y ninguneo de la palabra, degradación o pérdida de puestos de trabajo al regresar de la licencia por maternidad constituyen, entre otras conductas inadmisibles, prácticas que forman parte del paradigma de producción de noticieros y programas de tevé, diarios, radios, portales web a lo largo y ancho de nuestro país, tanto en medios públicos como privados".
Por último, cerraron alertando que "considerar que estas conductas, explícitamente sancionadas por la ley vigente, buscan la 'exigencia profesional' en pos de una excelencia informativa es la peor injusticia que estamos denunciando: sin dignidad no hay calidad".
