La próxima semana se votará en la Legislatura porteña el nuevo Plan Integral de Convivencia Vial. Este nuevo proyecto plantea cambios en las normas actuales. Los conductores que den positivo en el test de alcoholemia, recibirán una inhabilitación temporal de la licencia de conducir. También se modificaran los test teóricos y las pruebas prácticas de manejo serán evaluadas en la calle.
En caso de aprobarse este plan, la nueva ley reformará las normativas viales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Se actualizarían el Código de Tránsito, el Régimen de Faltas y el Código Contravencional. También habrá multas entre 8.000 y 53.000 pesos según el dosaje de alcohol del infractor. No se modificará la norma de acarreo de acarreo de vehículo y la retención de la licencia de conducir.
Con el objetivo de tener cero muertes por accidentes viales, se establecerá que el examen práctico de manejo sea en la calle y dejará de ser en circuitos cerrados. Los funcionarios que impulsan este proyecto aseguran que de esta forma la prueba será más realista. Los autos para las pruebas serán de doble comando e irán acompañados por especialistas del Gobierno de la Ciudad.
También se modificarían los exámenes teóricos. Se buscará aumentar la exigencia y pasará a tener 10 preguntas más que con el código actual. También será mayor el porcentaje de respuestas correctas para aprobar. Actualmente, se aprueba con un 75% y pasará a ser obligatorio tener un 85%.
Con el nuevo proyecto se incorporará de forma obligatoria una capacitación pedagógica para los instructores de manejo y serán sancionados quienes no estén habilitados para dar clases.