La reina Isabell II le otorgó un permiso especial a su nieto, el Príncipe William, su esposa la duquesa de Cambridge Kate Middleton y sus tres nietos, para realizar unas vacaciones familiares en el extranjero. Los duques fueron vistos en el aeropuerto de Gatwick.
La monarca les concibió este permiso debido a una antigua norma de la familia real que impide que los herederos inmediatos al trono viajen juntos. Dicha regla fue creada para proteger el linaje de la familia real.
Según el diario Mirror, esta vez puede ser una de las últimas veces que la familia viaje en el mismo avión, debido a que el príncipe George tiene ocho años. Esta antigua regla exige su cumplimiento sin excepciones cuando el niño alcance la edad de doce años. A partir de ese momento, se le pedirá que vuele separado de su padre por cualquier accidente que pueda suceder.
Dicha norma fue creada para proteger el linaje de la familia real, esto se debe a que William y George ocupan el segundo y el tercer lugar en la línea de sucesión al trono respectivamente, lo que significa que deben viajar por separado en caso de que ocurra algo trágico en el camino.
En 2014 la monarca también accedió a este permiso para con su nieto y heredero al trono. William viajó en el mismo avión que el resto de su familia a Australia y Nueva Zelanda, debido a que su hijo tenía 9 meses de edad. La corona le volvió a otorgar el beneficio a la pareja en septiembre de 2016, cuando viajaron con George y Charlotte a Canadá. Los Cambridge volaron juntos de nuevo durante una gira por Polonia y Alemania en julio de 2017, realizando un total de tres vuelos juntos.
Por el momento se desconoce el destino de las vacaciones familiares de los duques de Cambridge, algunos especulan que pueden haber viajado a Grecia para la boda del ahijado de la princesa Diana, el príncipe Philippos y Nine Flohr. Se sabe que la familia ha estado de vacaciones en lugares como las islas de Scilly, Lake District y su hogar en Norfolk, Anmer Hall.