"El fútbol y la política son dos cosas que siempre me apasionaron, por eso trato de brindarme al 100% en ambas actividades y estar siempre lista para afrontar lo que haya que afrontar", admite Maca Sánchez (29), la dueña de la pelota que se desempeña como Futbolista Profesional en San Lorenzo de Almagro y como Directora Ejecutiva en el Instituto Nacional de Juventudes.
–En el fútbol te convertiste en la cara de la lucha por la profesionalización del fútbol femenino. ¿Cómo surgió?
–Fue algo inesperado que nació hace poco más de dos años como consecuencia de un despido a mitad de un torneo. En ese momento, sentí que era tiempo de dar batalla porque ya habían sucedido muchos episodios similares al mío en el fútbol femenino. O sea, no fue una cuestión individualista, todo lo contrario. Pero la lucha –que derivó en un juicio– se hizo tan visible que terminó derivando en la profesionalización.
"Obviamente no fue en su totalidad, porque no todas las jugadoras son contratadas, pero es un gran avance que va más allá de mí ya que es un esfuerzo que venimos haciendo hace muchísimos años. Así que es un logro de todas las jugadoras de fútbol", comenta Maca acompañando el lanzamiento de Fuerza de Mujer.
"Por una cuestión cultural, a lo largo de la historia el fútbol siempre ha sido un deporte muy machista, y, más allá del fútbol, en todas las disciplinas, a la mujer se la ve como más débil, y por eso se la ha relegado y se le ha dicho dónde tenía que ir y qué cosas hacer y cuáles no. Creo que es así en toda la sociedad y el fútbol no está exento de eso. Es algo que vivo desde chiquita: las jugadoras sufrimos discriminación y exclusión, y no tenemos lugares físicos donde entrenar. También hay personas que nos dicen que no vamos a llegar a nada y que no tenemos un futuro... así que es muy valioso que podamos salir adelante a pesar de todos esos palos en la rueda".
–¿Cuál sería la próxima meta?
–Que los clubes les sigan dando importancia y que haya divisiones infantiles y juveniles en todos los clubes. Me encantaría ver, como pasa en el fútbol masculino, algún torneo de infantiles, juveniles y reserva. Eso va a hacer que el fútbol femenino crezca mucho.
–¿Y tus proyectos cuáles son para lo que queda del 2021?
–Bueno, ahora en noviembre tengo la Copa Libertadores –es mi quinta Copa Libertadores, pero la primera con San Lorenzo– así que esperemos hacer un buen papel. Creo que venimos trabajando bien porque es un club que pone el fútbol femenino a la par del masculino y eso se ve en los resultados. Y obviamente me gustaría levantar la copa y ser el primer club argentino en el fútbol femenino en traer la copa a nuestro país.
–¿Lo ves como un sueño lejano?
–Es difícil, la verdad que es una competencia bastante complicada porque dura dos semanas y es un partido cada 48 horas, que es complicado para la salud de las jugadoras, pero nosotras vamos a dar lo mejor para representar al país y a San Lorenzo.
–Seguramente alguna chica que quiere ser jugadora y no se anima te está leyendo. ¿Hay algo que quieras decirle?
–¡Que no lo deje de intentar! Es un camino sumamente dificil en el que se va a encontrar con muchas frustraciones, pero que el enojo y la bronca y la impotencia las empuje para poder seguir peleando. Y que siempre pongan lo colectivo sobre lo individual. Eso es fundamental en este momento de recambio en el fútbol femenino.
–¿100% tiempo de recambio?
–¡100%! Creo que estamos viendo pequeños cambios que un futuro van a ser grandes transformaciones.
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