Este miércoles 8 de septiembre se cumple el noveno aniversario del fallecimiento de Blanca Vicuña, la primera hija que tuvieron Pampita (43) y Benjamín Vicuña (42) que falleció a los 6 años luego de permanecer nueve días internada en la Clínica Las Condes de Chile.
Ante una fecha tan significativa para él (donde además lo encuentra recientemente separado de la China Suárez), el actor chileno decidió sumar un nuevo diseño en homenaje a su fallecida hija. GENTE averiguó qué dibujo tiene pensado sumar en su piel y así se sumaron nuevas pistas que permiten tener un acercamiento. “Estuvimos trabajando sobre un diseño que representa un momento en su vida muy significativo e importante que tiene que ver con los afectos”, detallaron a este portal.
Por otro lado, aseguraron que estuvieron debatiendo con Benjamín sobre la idea, el estilo, el tamaño, la ubicación y lo que se busca representar con dicho tatuaje. "Vemos referencias, propuestas y se prepara el diseño. Una vez aprobado el diseño, se tatúa en la piel", advirtieron.
Esta semana, Vicuña compartió una interesante fotografía en sus Instagram Stories donde se lo observa viendo la tablet de Matu Bustaman, el dibujante del diseño y encargado de realizar el tatuaje. "Gracias, crack", agregó el actor junto a la postal.
Si bien desde donde fue tomada la fotografía no permite ver en detalle el dibujo que ambos miran atentamente en la pantalla del dispositivo, se puede entrever que se trata de un dibujo floral y más específicamente podría tratarse de rosas.
Este último dato, en caso de confirmarse, tendría mucho sentido ya que el artista ha compartido fotos de rosas blancas en sus historias en alusión a su hija por algún aniversario o simplemente para tenerla presente en su cotidianeidad.
El año pasado, Benjamín publicó una tierna fotografía junto a Blanquita en la que escribió conmovedoras palabras por el octavo aniversario del fallecimiento de su hija: "Nuestros mapuches creen que sus caballos los llevan a la eternidad. Toco toco los bautizaste por el sonido de sus pasos. Blanca luz irradia la Virgen en su día, Blanca mi niña que no conoció el miedo. El silencio y la mirada. Toco toco sonrío y camino. Mirando de reojo las fotos entro y puedo abrazar el momento".
"Mi hijo Bautista me pregunta el por qué de mi obsesión por inmortalizar hechos cotidianos y fotografiar como oriental cada día de nuestros días. Porque es la memoria, porque es un registro mágico que nos permite vencer el tiempo. Porque no se me ocurre otra manera de luchar contra el olvido. Ya entenderá mi Bauti y podremos juntos amansar la pena. Toco toco el cielo", cerró.